Argentina cuenta ya con los primeros lanzadores de cohetes LVC CP-30 de producción propia, desarrollados
por la estatal Fabricaciones Militares y el Instituto de Investigaciones Científicas y técnicas para la Defensa (Citedef), informaron fuentes oficiales.
Los primeros cuatro lanzadores de este tipo fueron entregados al Grupo de Artillería de Lanzadores Múltiples 601 del Ejército argentino por el ministro de Defensa, Arturo Puricelli, ‘A estas cuatro coheteras que han sido desarrolladas íntegramente por Fabricaciones Militares y Citedef, queremos sumarle el desarrollo de 16 más para completar una unidad de 20‘, dijo Puricelli en un comunicado difundido por el Ministerio de Defensa.
El ministro afirmó que ‘indudablemente, se trata de una capacidad de fuego muy importante que nuestra artillería no tenía, y que esperamos lograr en el más breve plazo‘.
Según el comunicado, estos lanzadores constituyen ‘un instrumento estratégicamente importante para las fuerzas terrestres, ya que permite negar zonas del terreno al agresor‘.
En 2008 el Ministerio de Defensa -mediante Citedef- y la Dirección General de Fabricaciones Militares, que depende del Ministerio de Planificación, firmaron un acuerdo para desarrollar en conjunto una serie de lanzadores múltiples y cohetes ‘Pampero‘.
Según el comunicado, en la actualidad existen dos alternativas para operar con este sistema de cohetes: Lanza VC CP-30, con capacidad de lanzamiento del cohete ‘Pampero‘ calibre 105 milímetros, y el lanzador CP-30, con capacidad de lanzamiento de cohetes ‘Pampero‘ con sistema SABOT, de 127 milímetro. El alcance máximo de estos cohetes es de unos 30 kilómetros. 
La plataforma móvil del LVC CP-30 se encuentra instalada sobre camiones Iveco Trakker.
El personal de la Unidad de Artillería de Lanzadores Múltiples se capacitó para el uso de este sistema de armas con ingenieros y técnicos del Citedef.