La Municipalidad de Joaquín V. González no previó ninguna solución para que los más de 50 chicos que se quedaron sin transporte escolar puedan asistir a la escuela, a 30 cuadras de los asentamientos donde viven . Así lo confirmaron fuentes oficiales de la comuna.

El municipio no permite trabajar a dos transportes escolares de tracción a sangre que llevan a 50 niños de los asentamientos San Antonio, Nueva Esperanza, y Facundo Quiroga hasta una escuela del centro de la ciudad.
Si bien en la zona de los asentamientos hay una escuela, el grave deterioro del edificio y la falta de obras por parte de la Comuna hizo que las clases no puedan empezar en ese edificio y los chicos de la zona se ven ahora obligados a acudir a la escuela del centro, a más de 30 cuadras de sus casas.

El Tribuno intenta infructuosamente desde el lunes comunicarse con el intendente de la ciudad de Joaquín V. González, Juan Aguirre, para conocer las razones por las que los transportes fueron clausurados o si hay un plan de contingencia para que los niños puedan ir a la escuela. También se intenta conocer por qué el edificio de la escuela a la que asistían estos niños de escasos recursos no fue refaccionado si la Provincia descentralizó los fondos para esas obras.
“Lalo” Pons, encargado de prensa de Joaquín V. González, admitió a El Tribuno que “la Intendencia no tiene ningún plan de contingencia para que los chicos lleguen a la escuela porque para eso sus padres tienen subsidios”.
Ponce señaló además que “la distancia desde los asentamientos hasta la escuela del centro no es de 30 cuadras sino de 12” por lo que los chicos “tranquilamente pueden llegar caminando”.

Lo que no pudo explicar el funcionario es por qué las obras en la escuela de la zona no se hicieron. Además se negó a coordinar alguna entrevista con el intendente o con otro funcionario comunal que pudiera aportar datos certeros sobre la situación.
Ponce deslindó responsabilidades en la decisión de sacar de circulación a los carros que llevan a los chicos a la escuela y dijo primero que la decisión la tomó el Concejo Deliberante. Sin embargo, minutos después dijo que el responsable de la decisión fue el director de Tránsito de la ciudad de quien se negó a dar el nombre y propició un teléfono falso del organismo.
“La solución para que estos chicos vayan a la escuela saldrá de un proyecto que el Concejo Deliberante empezará a tratar el viernes próximo. La intención es que una empresa privada haga un acuerdo con el municipio para llevar a los chicos con costo subsidiado”, resaltó Pons, aunque dijo desconocer el nombre de la firma.