Si sos amante de las telenovelas; si te emocionan hasta las lágrimas esas escenas típicas en las que el galán recupera la vista milagrosamente después de haber quedado ciego por una emoción fuerte; o el grado de indignación que te provoca la villana que finge un embarazo para retener al protagonista te lleva al punto de odiar a todas las conocidas que tienen su mismo nombre... Si te involucrás así en estas historias... O, por el contrario, te divertís con los estereotipos de la telenovela, no podés perderte el preestreno de “Muñecos del destino”, un miniserie hecha íntegramente con títeres, que se podrá ver hoy -en maratón de 8 capítulos-, a las 19, en el Museo de Arte Contemporáneo (Zuviría 90). Se trata de una producción de los tucumanos Rosalba Mirabella y Patricio García (Anarcovisión) que integra la triple propuesta que se inaugurará hoy en el MAC. Las otras dos son las muestras “Paisajes desplegados / Agua de altura”, de Horacio Pagés, y “Ser argentino, una pasión”, de Sergio Fasola, en el marco de los XVII Encuentros Abiertos Festival de la Luz.

Historias de amor, intrigas policiales y hasta relatos de alcoba se cruzan entre telas y cartón pintado en el maravilloso mundo de los títeres.

“Muñecos del destino” es uno de los trabajos ganadores del concurso Series de Ficciones Federales para la Generación de Contenidos Audiovisuales Digitales.

Su tono es esencialmente paródico. “Creo que no dejamos elemento típico de la telenovela sin revisar, tal vez solo nos faltó que alguien pierda la memoria”, confesó Rosalba Mirabella a El Tribuno.

Pero la crítica más mordaz a este género fue poner como protagonistas a muñecos que por rostro solo tienen un par de botones a modo de ojos. “Los actores de telenovela son tan de madera que no se necesita expresión para imitar su trabajo. Todo en este género está tan subrayado, tan sobremusicalizado, que la expresión de los actores realmente pierde importancia para darle a entender las cosas al público”, sostuvo Mirabella. La joven tucumana, exestudiante de cine, confesó que, al inicio del proyecto, había en el equipo quienes temían que los rostros de los muñecos resultaran inexpresivos. “Pero nosotros, con Patricio, nos habíamos pasado un par de años viendo novelas por lo que no dudamos en ningún momento: el acento expresivo está en el montaje, la música, las voces en off y el lenguaje corporal de los muñecos”. La miniserie, que se emitirá por Canal 7 a fines de este mes, es “bastante amable” con la sociedad tucumana que funciona como escenario -contó Rosalba-, pero de todas formas fue censurada en la provincia vecina.