Si bien los problemas no están del todo controlados, sobre todo en localidades del interior como es el caso de Chicoana, San Luis, Campo Quijano, Cerrillos, San Antonio de los Cobres, entre otros, en general la situación tiende a normalizarse. En Rosario de la Frontera se ha producido una especie de psicósis entre sus habitantes, y circula el rumor de que se está acercando un tornado a la zona, lo cual ya fue desmentido.

Todavía hay muchos barrios sin luz y otros incluso sin agua. De acuerdo a lo que se pudo saber, las acciones para enfrentar este temporal de viento zonda que alcanzó una velociadad de 100 km/hora, fue bastante desorganizada e improlija.

Los policías en El Portezuelo

La situación en el barrio El Portezuelo, se tornó dramático ya que las llamaradas de los focos ígneos en la zona del cerro San Bernardo y 20 de Febrero, comenzaron a acercarse a las casas, incluso hubo daños materiales en algunas de ellas. Ante la escacez de las dotaciones de  bomberos, los policías se armaron con ramas de árboles para sofocar el fuego a chicotazos. Incluso en algunos casos lanzaban agua con vasos.

Por otro lado el director del Samec, Mario Palacios, informó que tuvieron que cubrir toda la ciudad para asistir a heridos sobre todo por voladuras de chapas y problemas respiratorios por el humo.