El ministro de Agricultura, Norberto Yauhar, decidió romper el silencio y advirtió a las entidades agropecuarias que integran la Mesa de Enlace que cuando decidan sentarse por separado para dialogar con él, en respuesta a las condiciones de su invitación, quizá sea “demasiado tarde”.

La advertencia fue lanzada por el funcionario al término de la XXV Reunión Ordinaria de Consejo Agropecuario del Sur (CAS), del que cedió este viernes la presidencia pro témpore a su par de Bolivia, Nemesia Achacollo.

“Esperamos que cuando decidan sentarse, no sea demasiado tarde”, dijo Yauhar en la conferencia de prensa, y señaló que el Gobierno no va a aguardar hasta fines de abril para tomar medidas. Por lo tanto, los tironeos con los integrantes de la Mesa de Enlace continúan en un año que Yauhar definió como político y que lo hizo mostrarse convencido de que en 2013 no habrá espacio para tratar ni la ley de semillas ni la de tierras.

Yauhar invitó en dos ocasiones a Federación Agraria Argentina (FAA), Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), Sociedad Rural Argentina (SRA) y Coninagro a reunirse cada entidad en una fecha determinada.

En dos oportunidades también las entidades le respondieron que preferían ir unidas, en conjunto, y también propusieron que se dictara una prórroga a esas fechas de la agenda oficial.

Sin embargo, Yauhar aseguró al periodismo que no recibió ningún pedido de postergación, el cual, en realidad fue consignado en un comunicado de la Mesa de Enlace, pero no se envió formalmente al Ministerio de Agricultura.

En este juego de poder, Yauhar aclaró que el oficialismo se reúne en las provincias con las organizaciones de productores y que cuando no pueden avanzar en las soluciones con las instituciones “tratamos de arreglarnos con los gobiernos provinciales o las organizaciones de segundo nivel”.

El desencuentro con la Mesa de Enlace se basa, para el funcionario, en decisiones que pasan más por el tema político que por el “exclusivamente técnico o si se quiere institucional, ya salido de los carriles de la parte gremial de las instituciones”.

“Esperamos poder revertir este tema, sentarnos a una mesa a discutir, no es una cuestión de vedettismo, no es de cartel, es muy difícil que ustedes me vayan a encontrar contestando, nosotros simplemente hemos hecho las invitaciones, con muy buena voluntad”, insistió.

Además, justificó la posición oficial en que no son iguales las organizaciones agropecuarias grandes con las pequeñasm y que tampoco afrontan las mismas situaciones un ganadero con cinco mil cabezas que uno con 20 o 30 vacas.

En tanto, los productores, esta vez unos mil, junto con dirigentes, por su parte, se dieron cita en la localidad entrerriana de Villaguay, en una nueva asamblea donde coincidieron en la necesidad de mantener la unidad de acción de la Mesa de Enlace.

Mientras se diluye la posibilidad de que haya un cese de comercialización de la soja 2012-2013 que ingresa todos los días a puertos, los productores insistieron, sobre todo los de FAA, con la puesta en marcha del sistema de retenciones segmentadas.

Los entrerrianos se pronunciaron por culminar el proceso de asambleas que inició la Mesa de Enlace en Pehuajó con la realización de protestas, en caso de que no haya cambios por parte del Gobierno.

Todo esto ocurría en una semana movida, por un lado el mercado de Chicago, donde el precio de los futuros de la soja bajaba en forma consecutiva debido a la buena recolección de la oleaginosa en las áreas agrícolas latinoamericanos. Por otra parte, la sorpresiva designación del arzobispo de Buenos Aires, Jorge Mario Bergoglio, como el nuevo Papa, primer americano y jesuita, ocupó las noticias y conmovió a la multitud de argentinos. Las entidades agropecuarias utilizaron el momento para reflexionar y así Eduardo Buzzi, titular de FAA, manifestó: “Bergoglio, que tomó el trascendental nombre de Francisco, tiene por delante una gran responsabilidad. Hacemos votos para que este hecho sea una oportunidad que nos lleve a una profunda reconciliación de los argentinos”. El tema de la unión es caro al campo, que desde 2008, cuando también en marzo se impuso la resolución 125 que instauraba alícuotas móviles a las retenciones a los granos, protagoniza un enfrentamiento con el Gobierno.