El milagro de lo impensado ocurrió ayer en el estadio Mary Terán de Weiss, cuando el “Hulk argentino” Carlos Berlocq hizo realidad su mayor sueño y con el histórico triunfo sobre Gilles Simon le dio al país su primera victoria en la historia sobre Francia (1-5), para llegar por cuarta vez consecutiva a semifinales de la Copa Davis. Ahora deberá viajar a República Checa, en septiembre.

Y el éxtasis con el que terminaron los hinchas en el estadio Mary Terán de Weiss, junto a todo el equipo argentino, fue la explosión de un cúmulo de tensiones, de seis horas de una jornada en la que se pasó de la decepción a la euforia.

Porque con su contundente triunfo en tres sets sobre Juan Mónaco (6-3, 6-3 y 6-0), Jo-Wilfried Tsonga (8 del ranking mundial) estiró la definición y obligó a salir a la cancha a Berlocq y Simon. En un partido cambiante, desde lo anímico y lo tenístico, el oriundo de Chascomús se impuso por 6-4, 5-7, 6-4 y 6-4, en tres horas y 48 minutos de juego para sellar el pasaje a la próxima ronda y regalarle la victoria a las más de diez mil personas que se acercaron al barrio porteño de Villa Soldati.

Berlocq había inaugurado la serie el viernes con derrota frente a Tsonga en cinco sets y Mónaco dejó igualadas las acciones después de su triunfo sobre Simon. Y el doble del sábado con David Nalbandian y Horacio Zeballos en un gran nivel para vencer a una de las mejores parejas del circuito como son Michael Llodrá y Julien Benneteau había dejado match point a la Argentina.

Este triunfo sobre Francia, primero en toda la historia, tiene un plus más que importante para el conjunto dirigido por Martín Jaite, que a principio de año se puso como objetivo no caer con Alemania de local para evitar el repechaje para no descender al Grupo Mundial. Y pese a no contar con su mejor jugador, Juan Martín del Potro (quitó la Davis de su calendario para 2013), el equipo argentino está una vez más en las semifinales y a dos pasos de su primera y tan deseada ensaladera de plata.

El camino a las semifinales no había comenzado bien ayer. El francés Tsonga no le dio respiro a Pico Mónaco, quien en ningún momento pudo desarrollar su tenis.

“Fue bastante superior, no me dejó hacer nada”, expresó tras el encuentro. Luego fue el turno de Charly, comenzaba a gestarse la hazaña, empezaba a marcarse el camino a una nueva semifinal copera.

El quinto hombre

El capitán del equipo francés, Arnaud Clemente, y Gilles Simon admitieron estar decepcionados” por la derrota y coincidieron en el peso que ejerció el público en favor del conjunto argentino. “No me ayudó para nada el público, pero ya sabía que iba a ser así. Argentina tiene uno de los mejores públicos y lo usan bien a su favor”, expresó Guilles Simon, en conferencia de prensa.