Los voluntarios de Techo tendrán mucho trabajo durante el fin de semana. Pero el trabajo es todo el año. Incansable.
A partir de mañana, todas las personas que trabajan en este voluntariado, saldrán a las calles a recolectar las donaciones de los salteños. La misión es la misma de siempre: recaudar dinero para poder comprar los materiales y así, luego, construir viviendas para aquellos que no tienen casa. Se trata de disminuir los índices de crisis habitacional en Salta y en el país.
Para los salteños, será una nueva alternativa para colaborar. Para consultar cuáles son las otras vías para ayudar, se puede ingresar al sitio web www.techo.org.
“Cuando tenés techo, no tenés techo”, es el slogan que resume el objetivo que da eje vertebral al trabajo de Techo.

Más sobre Techo

Con la implementación de un modelo de intervención enfocado en el desarrollo comunitario, Techo busca, a través de la ejecución de diferentes planes, construir una sociedad justa y sin pobreza, donde todas las personas tengan la oportunidad desarrollar sus capacidades, ejercer y gozar plenamente de sus derechos.
Los planes en los que se trabaja son: la construcción de viviendas de emergencia y la organización de mesas vecinales que solicitan y lideran distintos programas como capacitaciones en oficios, microcréditos para fomento productivo, salud, educación y huertas.
¿Porqué? Porque hay mucha gente que vive en asentamientos y que no tiene un techo, ni paredes, ni piso, sino una casilla mínima, peligrosa e improvisadamente armada con piso de tierra, paredes de cartón, retazos de bolsas, y un techo lleno de agujeros. Donde las diferencias entre estar adentro o afuera no existen. Si llueve, se mojan y si hace frío, se enferman.
Tener un techo es tener un lugar donde poder comer, dormir, estudiar, trabajar y formar una familia. Es el lugar mínimo e indispensable que todos necesitamos para vivir dignamente.
“Tener un techo, no es sólo vivir bajo techo”. Esa es otra de las premisas que ilustra el espíritu de este gran grupo de personas solidarias.