La presidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner disparó anoche contra los sectores económicos que buscan imponer condiciones al poder político y, mostrando su lado sensible, relató como fueron las últimas horas de Néstor Kirchner.

Durante una entrevista que se emitió ayer y que concedió al periodista Jorge Rial, en el marco del ciclo “Desde otro lugar”, Cristina contó también que en 1988, en las internas del Partido Justicialista, ella quiso votar a Carlos Menem, y recordó que eso generó fuertes discusiones con Néstor Kirchner.

La presidenta se conmovió al reconstruir la última noche que pasó con Kirchner antes de su repentina muerte, el 27 de octubre de 2010.

‘Néstor no se peleó con nadie la noche que murió. Eso es ciencia ficción‘ dijo, desmintiendo a quienes aseguran que tuvo una fuerte discusión con el dirigente sindical Hugo Moyano. ‘Esa última noche estábamos mirando televisión y aparece el gordo Luis D’ Elia en un programa de cable. Estaban discutiendo si iba a ser (candidato a presidente en las elecciones de 2011) Néstor o yo.

El gordo decía que le daba lo mismo, pero contó que Néstor hubiera dicho ‘Yo era un 4 en la facultad, Cristina, un 10‘. Entonces Néstor gritó: ‘¡Gordo traidor!‘, relató Fernández. ‘Me dio tanta ternura cómo lo dijo, que yo salté y le di un beso en la boca‘, confesó la jefa de Estado, quien señaló que ese fue el último beso que le dió.

Al profundizar en su relación con Néstor Kirchner, relató que tras la derrota legislativa de la resolución 125, “en la madrugada él me dijo: ‘siento que no voy a poder protegerte más’”. Pero confesó que “ni siquiera en ese momento de debilidad de él me sentía desprotegida”.

También desimintió que haya pensado en renunciar: “Hubo un momento donde él sintió que se había equivocado con quien era mi compañero de formula” y expresó que “verlo derrumbado fue muy fuerte, porque él era la imagen de la fortaleza y la protección”.

Durísima crítica

Enfocándose en la actual gestión y al recordar la protesta del campo y la corrida bancaria luego de su triunfo en las elecciones de 2011, la jefa de Estado aseguró que “lo que quieren los sectores económicos es imponer condiciones al poder político”.
Afirmó que con la corrida bancaria, cuando se fueron 5.000 millones de dólares, “hubo un intento de ponerle condiciones a un gobierno que había ganando con el 54% de los votos” por parte de sectores que quieren “retrotraernos a la década de los ‘90”.
“Cinco mil millones de dólares en una corrida bancaria no lo hacen una o dos personas”, puntualizó, al ser consultada sobre el Círculo Rojo, que había mencionado Macri, en tanto que al ser consultada sobre si se trató de banqueros amigos, fue tajante: “No son amigos ni enemigos, son banqueros”, concluyó.

Las frases

• “Cuando Cobos votó en contra de la resolución 125, ni siquiera en ese momento de debilidad de él me sentía desprotegida”.
• “Hubo un momento en el que él sintió que se había equivocado de quien era mi compañero de fórmula”, (por Cobos).