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2 DE Julio 2014 - 03:52
Reconforta volver a España. Como siempre. Es un ejemplo del turismo mundial en calidez, eficiencia y buenos precios, en relación al resto de Europa.
La recepción de los ligados al turismo es excelente y el pueblo en general muestra sensibilidad y ayuda hacia el visitante.
La comida es exquisita, quizá mejor que nunca y sus precios están por debajo de todos los vecinos. Y el menú turístico oscila entre los 10 y 15 euros, incluye entrada, plato principal, postre y una bebida. Antes de seguir, recordemos que un euro, en su valor real equivale a 14 pesos argentinos.
Últimamente España es sinónimo de malas noticias por varios motivos: su crecimiento económico se detuvo hace varios años, los desocupados son más de 5 millones y luego de alcanzar el séptimo lugar entre los países más poderosos de la tierra, bajó al undécimo.
Los “ parados”
No hay nada que preocupe más que la desocupación. Lo bravísimo del caso es lo que le ocurre a los jóvenes, ya que la mitad de los sin trabajo corresponde a menores de 25 años, quienes nunca consiguieron un puesto laboral o lo tuvieron precariamente.
Pero, créase o no, en la calle esto no se advierte fácilmente, porque son pocos los que piden limosna y menos aún los que duermen en las calles.
¿Cómo se enfrenta esta pésima situación? Los beneficios que otorgaba el Estado benefactor, se han reducido al mínimo. Los inmigrantes extranjeros, salvo los africanos que intentan llegar de cualquier manera, ya son muy pocos.
Los argentinos que antes constituían una colonia numerosa, ahora son apenas 250.000, tres veces menor que tres años atrás.
Peor aun, ya que al menos la mitad de los asalariados sufrió un recorte en sus ingresos, de un 10% como mínimo. Si bien la inflación es muy baja, un 2 % anual, los que ganan 1000 euros, que son la mayoría, deben destinar el 50 % al alquiler en una zona aledaña.
Más de 60 millones
Desde la época del franquismo con Javier Fraga Iribarne, como ministro de turismo, y bajo el fenecido eslogan “España es diferente” España es en el rubro una potencia mundial.
Es la tercera nación en el mundo que más turistas recibe por año. El primer lugar lo ocupa desde hace muchos años Francia, que es visitado cada año por 89 millones de extranjeros. EE.UU recibe a 71 millones y el año pasado España fue visitado por 61 millones. El tercer lugar lo ocupa China con 58 millones de visitantes.
Entre las ciudades más visitadas está Madrid con 10 millones de viajeros y le sigue como es esperable Barcelona, que tiene atractivos insuperables: la iglesia Sagrada Familia de Gaudí, el Museo Picasso, y el de Joan Miró, las ramblas y todas las expresiones de Art Decó.
El 11 % del PBI
El ingreso por el turismo es tan representativo que suma el 11 por ciento del PBI, América suma muy pocos visitantes el 4%. Pero cuatro países de la Comunidad Europea suman el 60 por ciento: Reino Unido, Alemania, Francia, Italia. Los número uno son los británicos, a quienes no solo le atraen los paisajes y las playas, sino fundamentalmente los precios.
En la tierra de Antonio Machado, el costo de vida es tres veces menor al de Londres.
Los nuevos visitantes advertibles a simple vista son los chinos que aumentaron un 35 % le siguen los rusos, con un 32 % más que prefieren la Costa del Sol en Andalucía, y que no se limitan a pasear sino que son grandes compradores de propiedades.
Según el INDEC, nuestro país fue visitado en el 2012 por 2.600.000 personas. En el mundo en el 2013 viajaron más de 1000 millones de turistas.
Más de 35 mil hoteles
La cifra precedente habla por sí sola de la capacidad hotelera de los ibéricos. Y no solo eso, sino de la calidad de sus establecimientos. Este periodista puede dar fe que la relación precio y calidad no tiene parangón en el resto del mundo.
Un hotel 3 estrellas español equivale a un 4 de cualquier país europeo, es más, debido a su buena atención, limpieza absoluta, uno puede alojarse tranquilamente en un hostal de una estrella, sin sorpresas ni malos entendidos.
Otro aspecto destacable y no solo en los hoteles es la calidad y aseo que se observan en los baños de las estaciones, restaurantes y bares. En el primer caso se paga 0,50 euros, pero es tal la limpieza y lo que se ofrece que es muy barato en relación a otras naciones.
En las estaciones de Francia se paga tres veces más que en España, y en Londres cuatro veces más.
Con 44 patrimonios
En el país de Antonio Banderas, la UNESCO elevó a la categoría histórica de la humanidad a 44 lugares y parques nacionales. Solo Italia la supera en números. Además es la sede de la Organización Mundial de Turismo.
Volviendo a los argentinos residentes allí, digamos que una tercera parte está en una situación irregular y un 20% reside normalmente porque posee pasaportes comunitarios, gracias a sus antepasados.
Dos hechos auspiciosos para nuestros compatriotas, el 34 % de los que viven en la tierra de Cervantes cursó el secundario completo y las deportaciones que años atrás ocuparan muchos titulares en los medios argentinos, ahora se han reducido a una expresión mínima.
Esta es la España de hoy, con sus aciertos, errores y omisiones. Con la mayoría de los políticos totalmente desprestigiados. Con la abdicación de hasta hace poco muy respetado rey Juan Carlos, baluarte junto con Adolfo Suárez de una transición democrática digna de imitar en cualquier parte del mundo. Hoy con la asunción de Felipe, el flamante monarca, el país espera una nueva estrategia para salir de la crisis que Mariano Rajoy, un náufrago que en la mitad del océano espera con apenas un salvavidas, no solo para mejorar al país sino a su propio partido, salpicado por la corrupción.
Mientras tanto, la infanta Cristina, hija del rey saliente, espera con miedo no llegar a la cárcel.