Las dos últimas jornadas del juicio por corrupción de menores contra el exintendente de El Bordo, Rosario Mazzone, Manuel Amador y Elías Valdez, estuvieron marcadas por contradicciones. Los testigos, que desde el martes empezaron a desfilar por el banquillo de la sala I del Tribunal de Juicio, incurrieron en incoherencias y hasta hubo jóvenes que revelaron haber sido inducidas a mentir en su primera declaración. La cuarta jornada de audiencias seguirá hoy, a partir de las 8.30, en la planta baja de la Ciudad Judicial.

De los siete testimonios que se escucharon ayer, el de Beatriz Lezcano (20 años actualmente) dejó tela para cortar y analizar en el marco de una causa que tuvo repercusión nacional. El 8 de enero de 2015 El Tribuno daba a conocer las imágenes en las que Rosario Mazzone, intendente de El Bordo, aparecía junto a jovencitas menores de edad, en ropa interior y con una caja de vino en una de sus manos. Según el exfuncionario, se trató de un asado que todos los años organizaba para los remiseros de esa localidad, fue el 19 de diciembre de 2014.

"Elías Valdez nos llevó a la finca -La Ramada-, cuando llegamos nos presentaron a Chicho y nos pusimos a tomar algo -vino-. Después nos fuimos todos a la pileta, las chicas junto con los remiseros", apuntó la joven Lezcano. Al ser consultada por el juez Federico Dohorman sobre si todos habían entrado a la piscina, haciendo alusión al resto de los remiseros y la gente que estaba en la casa esa noche, la testigo agregó: "Los únicos que se metieron en la pileta fueron Elías -Valdez- y Chicho. Nos bañamos, jugamos al vóley y no pasó nada", aseguró.

Respecto al tema de las insinuaciones para tener sexo esa noche, la testigo aportó que "Aylén -Céspedes- comentó que Chicho le había ofrecido tener relaciones. Le dije a la Belén que nos fuéramos porque no nos interesaban esas cosas". Según la joven, el ofrecimiento habría sido en el interior de la casa donde habían ingresado "Aylén, Oriana, Carolina, Mazzone y Amador", este último ofició de "fotógrafo".

La fiscal Luján Sodero le recordó a la testigo cuando fue entrevistada por una psicóloga, donde manifestó tener miedo, dado que si hablaba "en contra de Chicho" le podía "pasar algo". "¿Es cierto?", preguntó Sodero. Mirando al piso, la joven afirmó que sí.

Al igual que Lezcano, las hermanas Carolina y Belén Martínez, menores de edad que estuvieron en la fiesta del intendente, fueron inducidas por Elías Valdez a mentir en su primera declaración. "¿Elías te dijo que dijeras que estaban la mujer de Mazzone y sus hijas?", preguntó. "Sí", respondió Carolina.