Acceso web El Tribuno:
www.eltribuno.com
Contacto:
Editor: Pablo Juarez
E-mail: pjuarez@eltribuno.com.ar
Teléfono: +54 387 4246200
Por cualquier consulta administrativa o referida al sitio, puede escribirnos a: contactoweb@eltribuno.com.ar
Director: Sergio Romero
Telefono: +54 0810 888 2582
Razón Social: Horizontes On Line SA.
Registro de propiedad intelectual: 69686832Domicilio: Av. Ex. Combatientes de Malvinas 3890 - CP (A4412BYA) Salta, Argentina.
Un solo punto de recolección produjo basurales en diferentes sectores del barrio. Pablo Yapura
Unas 1.500 personas viven en el barrio de la zona este alta, distribuidas en 10 manzanas en pleno cerro. Al problema de los residuos se le suma la falta de transporte público y de cloacas.
27 DE Septiembre 2017 - 00:00
Un solo cesto de basura para 1.500 personas y un único ingreso para cinco barrios en los que residen en total unas 7.000 almas describe lo que viven a diario los vecinos del barrio Las Colinas, ubicado detrás del Autódromo al este de la ciudad.
Ese único ingreso, compartido con los barrios Canillita, San Mateo, San Lucas y Torino, es una calle de tierra sin enripiar que en verano se transforma en un barrial con una laguna en el ingreso. "A pesar de que ahí está la naciente del canal Tinkunaku, las aguas no tienen cómo salir porque no hay desages", le contó a El Tribuno Miguel Quiroga, un técnico en minas jubilado de Vialidad de la Provincia y presidente del Centro Vecinal.
Por allí tienen que transitar niños, viejos, jóvenes, enfermos, embarazadas, mujeres con niños y discapacitados para llegar a la parada de ómnibus.
El que menos tiene que caminar recorre 8 cuadras, pero pueden llegar a caminar hasta 15 para acceder al transporte público. Cuando llueve torrencialmente o hay un temporal, el colectivo se queda en la colectora de la autopista Acceso Norte. "Son varios los problemas que tenemos pero el más acuciante es el de la basura y el transporte", agregó Quiroga.
En estos días les comunicaron que existía la posibilidad de que ingrese el ómnibus hasta el sector donde está la capilla, en la zona baja del barrio.
Ansiosos, los vecinos esperan que esto se concrete.
La basura
El único cesto comunitario de residuos está al frente de la capilla, ahí también está el playón deportivo y la plaza con juegos infantiles.
Los fines de semana y días feriados la situación se torna insostenible porque se colmata en pocas horas; las bolsas con residuos comienzan a caer o las sacan los perros y toda la zona se transforma en un basural. "El olor es insoportable los días que hace calor", agregó Oscar Argañaraz, tesorero del Centro Vecinal.
Pero el problema es aún más grave.
Debido al acotado servicio de recolección, algunos vecinos del sector alto del barrio comenzaron a arrojar las bolsas en un zanjón que queda en medio del barrio, creando un basural a cielo abierto. En el lugar hay desde materiales orgánicos, hasta pilas y pañales entre tantos otros residuos más. El paisaje se completa con bolsas colgando de los árboles.
"Nosotros hicimos todas las gestiones ante la Municipalidad, incluso les entregamos un croquis de los lugares en que podrían colocar otros cestos", dijo Quiroga a El Tribuno.
Los vecinos reconocen que es peligroso para el camión recorrer las calles del barrio, sobre todo en verano cuando se transforman en un barrial, por eso estudiaron los lugares más aptos por donde podría ingresar. "El camión recolector asistido por la camioneta podría entrar. El señor Normando Zúñiga, director general de Servicios Públicos de la Municipalidad, nos dijo que lo iba a conversar con Agrotécnica, pero finalmente nos dijo que esto no era posible por una cuestión presupuestaria", agregó Osvaldo Yurquina, integrante de la comisión directiva del Centro Vecinal.
20 años de lucha
Las Colinas es una barriada de gente trabajadora que ocupa unas 10 hectáreas detrás del barrio Autódromo. En total son 10 manzanas. Los vecinos que hace 20 años construyeron ahí sus viviendas tienen los boletos de compra venta firmados ante escribano como manda la ley, sin embargo, cuando quisieron escriturar se dieron con que la información era falsa. Se constituyeron como Centro Vecinal y realizaron las denuncias correspondientes.
La mujer que los estafó actualmente se encuentra cumpliendo condena, no obstante ellos no logran regularizar la situación catastral y, tras eso, no pueden solucionar problemas como los planteados.
"La situación catastral es complicada, porque hay parte que son tierras provinciales, otras que corresponden al autódromo y las menos, privadas", afirmó Quiroga. Estiman que el 30% de esas tierras son de particulares. A comienzos de año, Tierra y Hábitat recibió toda la documentación que tiene cada uno de los vecinos acreditando su buena fe, pero el trámite quedó ahí. "Nosotros esperábamos que nos hicieran un censo, que sería lo que corresponde pero quedó todo dormido", dijo Quiroga.
Los vecinos reconocen los servicios con los que cuentan, agua y luz. "Antes de las PASO nos instalaron el alumbrado público. Eso es una gran ayuda", acuerdan. Casi el 90 por ciento del barrio tiene los servicios. Están faltando los que se asentaron con el tiempo y que no están incluidos en el proyecto original de solicitud de estos servicios.
Asentados
El problema que se suscita, de un tiempo a esta parte, es que se están asentado familias. "Al no ponerse en claro la situación dominial de las tierras, nos encontramos con que viene gente y se asienta", dijo Quiroga, y agregó que desde Aguas del Norte les reclaman esta situación. "Parece que creen que el Centro Vecinal está otorgando los espacios. Nosotros no tenemos ninguna autoridad. Eso es consecuencia de la falta de regularización catastral", agregó Argañaraz.
Hace poco tiempo tuvieron una audiencia con el titular de Tierra y Hábitat, Ángel Sarmiento, pero no se avanzó en el complejo tema.