Más de un centenar de jubilados y pensionados de Molinos recibieron anteojos de receta. La entrega estuvo a cargo de Sol Figueroa, coordinadora del PAMI Salta, el intendente Walter Chocobar y representantes del Centro de Jubilados local.

“Previamente llevamos a cabo un operativo con oftalmólogos y también con dentistas y trabajadoras sociales, con quienes recorrimos no solo el sector urbano de Molinos, sino también los parajes rurales como Colomé, Tacuil, Amaicha, entre otros. Se detectaron patologías habituales a la edad y gracias a Dios ningún caso de gravedad”, explicó Figueroa.
La representante del PAMI destacó que el trabajo coordinado con el municipio les ha permitido llegar a zonas de difícil acceso y comenzar a acercar programas sociales al flamante Centro de Jubilados de Molinos, que actualmente se encuentra tramitando su personería jurídica. 
“El PAMI facilita a los centros de jubilados desarrollar actividades preventivas, recibir subsidios económicos para que puedan contratar profesores, por ejemplo, especializados en gimnasia para adultos mayores en la que se priorizan los movimientos y la estimulación. También servicio de enfermería, pedicuría y organizar actividades grupales. A ello se suma, que se destinan partidas para los complementos alimentarios nutricionales”, recordó la representante del PAMI.

Por su parte, Chocobar destacó que un centro de jubilados es una entidad fundamental en una comunidad, porque se dedica a velar por los derechos de los adultos mayores, transmite información y genera espacios de contención. En el caso de Molinos está a cargo de don Felipe, contó el jefe comunal.

“En el Centro de Jubilados, los abuelos encuentran un lugar donde compartir, en el que pueden desarrollar diversas actividades y están contenidos, y que muchas veces no hacían. Estos son otros de los factores por lo que tienen tanta importancia estas organizaciones para los adultos mayores”, concluyó Chocobar.