La devaluación y la aceleración inflacionaria impactaron de lleno en las decisiones de consumo de los argentinos, sobre todo en momentos en que los salarios pierden la carrera contra los precios.
En ese escenario, la consultora Kantar WorldPanel afirmó que en el consolidado de julio, agosto y septiembre -un tercer trimestre agitado por la corrida cambiaria- se registró un caída interanual de 2% en el consumo masivo. 
La firma especializada pronosticó además un retroceso de 1,8% acumulado para este año y advirtió que, dado el actual escenario, no parece haber perspectivas favorables en el futuro cercano: el consumo masivo también caería en 2019, un 2,1%, según sus estimaciones.
Varios economistas coincidieron en que el consumo masivo seguirá en rojo empujado por el fuerte arrastre de este año, pero indicaron que podría mostrar una recuperación de la mano de un mayor salario real y una menor inflación, siempre y cuando el plan económico del oficialismo funcione.

Para atravesar la actual crisis, dijeron en Kantar WorldPanel, los consumidores estiran la vuelta al supermercado antes de abandonar compras en una categoría. Además, ya se profundizó el retroceso de las primeras marcas.

Según el Consumer Insights, que realiza trimestralmente Kantar WorldPanel, el tercer trimestre fue el primero en tocar el piso de 2% este año. "No hay una única realidad, cada nivel socioeconómico reacciona distinto. Por ejemplo, el segmento bajo superior marcó el pulso este último trimestre al caer un 6%".
"La reacción de los hogares ante el contexto económico del país es en general estirar la recompra antes que abandonar categorías, y además se acelera la caída de primeras marcas en todos los sectores de la canasta", explicó Filipponi.
Puntualmente, los hogares estiran la recompra de productos de consumo masivo en el 87% de las categorías analizadas, principalmente en aquellas prescindibles -que no son de primera necesidad-, comportamiento que atraviesa a todos los sectores de la canasta. Se destacan aquellas relacionadas con el cuidado del hogar.
El Indec ya había advertido caídas interanuales en las ventas de supermercados y centros de compra en julio y agosto (último dato disponible). En su última encuesta agregó a la medición a los mayoristas, que también mostraron un retroceso en sus ventas. Ese mes ese canal cayó bastante menos que el minorista (2,8% contra 4,2%, respectivamente).

Fuente: La Nación