El 16 de julio de 2012 dos adolescentes, Yanina Nuesch y Luján Peñalva, aparecieron sin vida en el barrio San Carlos. Antes de que se conociera públicamente la causa aparente o científica de las muertes, el gobernador salteño anunció que se trató de un pacto suicida.

Desde entonces y hasta el dictamen forense estadounidense la causa se mantuvo latente y durmió bajo el dictamen de un "pacto suicida". A seis años del hecho ocurrido en la zona sur de esta ciudad, donde los cuerpos aparecieron colgados en un árbol ubicado a orillas del río Ancho, en inmediaciones del barrio San Carlos, la causa mantiene la misma incertidumbre que en aquellos primeros años y parece encaminarse a una posible apertura.

El 22 de octubre del año pasado este medio lanzaba la primicia donde se expuso al público las conclusiones de un foro de forenses y criminólogos norteamericanos, quienes echaron por tierra los argumentos con que cerraron la causa los jueces salteños en 2011.