Al malestar que representan los nueve aumentos en el precio de los combustibles en lo que va del año, en el interior del país se suma el que produce pagar un valor más alto que en la provincia de Buenos Aires y la Capital Federal.

El 33,8% de aumento en el precio de los combustibles de la petrolera estatal en lo que va del año ubicó la nafta súper en, casualmente, $33,80 el litro en Salta. En provincia de Buenos Aires, en tanto, un usuario paga por el mismo combustible $30,09 y, en la Ciudad Autónoma, $29,37. Peor que los salteños la pasan, por dar un ejemplo, en Chaco, donde la súper de YPF se paga $34,89.

Como con la conformación del precio de los combustibles, las razones para que la nafta tenga valores distintos en cada provincia tienen varias y diversas explicaciones, la principal tiene que ver con la distancia de las refinerías con el punto de venta y los costos de comercialización. La explicación pierde fuerza cuando se expone, por ejemplo, que en puntos más cercanos a las refinerías los precios son más altos que en otros. Específicamente, aunque La Plata está a 9 kilómetros de Ensenada, donde está la destilería de YPF, y CABA a 60 kilómetros, en el distrito porteño se paga 72 centavos más barata la nafta súper.

El presidente del Instituto Argentino de Energía General Mosconi y exsecretario de Energía de la Nación, Jorge Lapeña, explicó que "el precio de la nafta se calcula por la materia prima, que es el petróleo, la cual está valuada en dólares, y después la refinería pone un margen de refinación".

En diálogo con El Tribuno indicó que "entonces, cuando hay modificaciones en el tipo de cambio, por ejemplo, se siente en el costo de la materia prima".

Lapeña explicó que "las diferencias en los precios de los combustibles entre provincias están dadas por los costos de comercialización que incluyen el transporte desde la destilería, que son pocas: hay una de YPF en Mendoza, en Luján de Cuyo; de Shell, en Dock Sud; de Axion, en Campana, y otra de YPF en Ensenada".

"En esos puntos -agregó- el precio de los mayoristas es el mismo; la diferencia entre un combustible en Córdoba, Santa Fe o Salta está dada por los costos de transporte y comercialización".

Consultado sobre el precio actual de los combustibles en el país, consideró que "si uno compara el precio de la nafta con los Estados Unidos, que es un mercado más competitivo donde no existen empresas que tengan una porción muy importante del mercado como ocurre en Argentina, donde por ejemplo YPF tiene casi el 60%, en general las naftas son más baratas".

Iniciativa salteña

Para intentar corregir las inequidades entre la Capital Federal y el interior del país, el diputado nacional por Salta, Javier David, presentó la semana pasada un proyecto para establecer un régimen de igualdad de precios de combustibles líquidos para los consumidores de todo el país. La iniciativa impulsa severas multas económicas para las petroleras que no unifiquen sus valores.
El proyecto fue girado a las comisiones de Energía y Combustibles; Defensa del Consumidor, del Usuario y de la Competencia, y de Presupuesto y Hacienda.
“Pagar combustible más caro en el interior es intolerable”, afirmó el legislador salteño en torno al proyecto que impulsa en la Cámara Baja y agregó que “las diferencias de precios de los combustibles atentan contra el desarrollo de las economías regionales de las provincias y son un peso más, en este momento crítico, para el costo de vida de los habitantes de las localidades del interior del país”.
El proyecto de ley “tiene por objeto establecer las condiciones de igualdad de precio en los consumidores de combustibles líquidos de todo el país”. Con ese objetivo, sostiene que “el Poder Ejecutivo Nacional deberá garantizar que los consumidores de combustibles líquidos de todo el país abonen como final un mismo precio homogéneo de comercialización para cada tipo de estos que sea vendido al público por parte de los expendedores habilitados en todas las jurisdicciones del país, considerando siempre en un mercado de competencia los precios de cada empresa petrolera”, y agrega que “el precio final igual y homogéneo considerará el total de los costos aunque estos incluyan componentes y/o valores distintos en razón de las zonas geográficas o la distancia”. No obstante, “exceptúa de lo dispuesto solamente los impuestos locales de cada jurisdicción que se agregarán al precio estipulado en la presente”.
Propone David que para “cumplir con la presente, el Estado Nacional podrá acordar con las empresas mecanismos compensatorios y/o distribuir y reducir la carga tributaria en las distintas jurisdicciones de tal forma que los consumidores accedan a igual precio por cada tipo de combustible y por cada empresa comercializadora en cualquier lugar del país”.
Uno de los puntos salientes del proyecto establece que las empresas que incumplan con las disposiciones de la ley serán pasibles de una multa de hasta un millón de pesos diarios por parte de la autoridad de aplicación, en este caso el Ministerio de Energía.
El diputado salteño fundamentó su iniciativa en que el proyecto “tiene como finalidad evitar asimetrías regionales desmedidas e injustificadas” y aseveró en este sentido que “no es posible que el litro de nafta en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires sea más barata que en provincias productoras de hidrocarburos como es el caso de la provincia de Salta”.
Remarcó que “los sistemas productivos de las economías regionales están ahogados económicamente” y que “no caben dudas de que la reducción de costos del combustible importaría un mayor desarrollo regional al generar una mayor sinergia de los factores de producción, además de trabajo genuino en una región muy damnificada por las políticas económicas de los últimos meses”.
Finalmente, resaltó que “en las últimas semanas la nafta aumentó en todo el país, pero las desigualdades entre Buenos Aires y el interior son un tema recurrente”, y recordó el caso del GNC por el que, oportunamente, presentó un proyecto y participó de las gestiones ante el Gobierno nacional.