Comenzó a registrarse en los últimos meses un aumento paulatino en la cantidad de atrasos en el pago de las cuotas, tanto en los créditos a las empresas, como en los destinados a las familias. Dentro del primer grupo, el sector comercio es el que dio el mayor salto, al duplicar el ratio de cartera irregular sobre el total, que de julio de 2017 a julio de 2018 pasó de 0,9% a 1,8%. O sea, el nivel es bajo pero la tendencia creciente revela el deterioro de la cadena de pagos que se está dando principalmente entre las pymes.
En la financiación a las familias, en tanto, las líneas destinadas al consumo son las que registran un mayor aumento en el nivel de morosidad, con un 4,2% sobre el total de la cartera en los préstamos personales y un 3,2% en las tarjetas de crédito. Del otro lado, en las líneas hipotecarias, la mora es mínima, y apenas llega al 0,2%. Así, en promedio, el ratio de morosidad de los préstamos a las familias se ubicó en 3,5%, según se desprende del informe sobre bancos que elabora el Banco Central.
"Las previsiones contables del conjunto de entidades financieras representaron 124% de la cartera en situación irregular del sector privado en julio", explicó el organismo monetario.

Más ganancia que en 2017

El mismo informe también destaca que los bancos redujeron levemente la rentabilidad respecto al mes precio, pero la incrementaron frente a julio del año pasado. En rigor, la ganancia de julio fue de $14.624 millones, una reducción de 3,2% respecto a los $15.109 millones de junio y un aumento del 67% al compararlo con los resultados de un atrás. Al referirse a la baja del margen financiero respecto del mes previo, el BCRA explicó que "fue explicada principalmente por mayores egresos por intereses, efecto parcialmente compensado por el incremento de los ingresos por intereses, de las ganancias por diferencias de cotización y de los resultados por títulos valores".

Fuente: BAE Negocios