El rendimiento inicial de Gimnasia y Tiro y los resultados preocupan sobremanera a los hinchas en un torneo en el que habrá ocho descensos. 
Y en este contexto la llegada de un clásico es un arma de doble filo: así como puede realzar anímica y deportivamente a un equipo en solo 90 minutos, también puede condicionar y hundir prematuramente. Si bien resulta para muchos absurdo dudar de la estabilidad de un proyecto en solo dos fechas, los resultados también mandan, inciden y complotan contra la premisa y la coherencia que la entidad de calle Vicente López pregona, la de sostener los procesos.

¿La continuidad de Víctor Riggio peligra en caso de una hipotética derrota mañana ante Juventud? Para la dirigencia, no. Y no se baraja esa posibilidad, ya que “el cuerpo técnico está comprometido, fuerte y con ganas” para sacar el barco adelante. Así lo manifestó el presidente de la entidad, Marcelo Mentesana, en diálogo con El Tribuno.

“No nos gusta arrancar así. Pero también entendemos que es propio del parate de cinco meses de la categoría, eso con un plantel nuevo hizo que nos cueste arrancar. Necesitamos mucho trabajo, dedicación y mejorar. Pero hay un plantel y un cuerpo técnico comprometidos a revertir este presente. Tienen todo nuestro respaldo, el técnico está fuerte. Es lógico que el hincha quiera que el equipo juegue bien y gane siempre. Antes del torneo nos faltaron equipos para jugar amistosos, hubo poco rodaje y hoy se siente, para todos los equipos de la zona, donde hubo muchos 0 a 0. Al hincha le pedimos paciencia y que confíe en el esfuerzo que todos estamos haciendo para mejorar”, expresó el directivo, para añadir luego:

“Queremos desdramatizar este juego, en nuestra cabeza siempre está sostener el proyecto. Las salidas de (José María) Bianco y (Duilio) Botella en su momento fueron por razones personales y unilaterales que no compartimos. Acá se hizo una apuesta fuerte con el 50 por ciento de chicos y al hincha le pedimos paciencia con este proceso. Nosotros queremos ganar, como quieren     ellos”.