Ayer sorprendió amargamente a los pescadores del río Bermejo arriba, y su afluente el San Francisco, ver infinidad de surubíes, bagres, dorados y sábalos de gran tamaño flotar muertos sobre el agua.

Un pescador informó: "Es impresionante lo que se ve entre La Junta y El Pepino, al frente de La Batea. En la zona se siente el olor característico de la babasa de la caña de azúcar, que seguramente proviene de los dos ingenios que están en las inmediaciones de los ríos Bermejo y San Francisco".

Ante este estrago, la Secretaría de Medio Ambiente debería dar respuestas científicas rápidas y concluyentes.

La mortandad causó desazón entre los pescadores, que se encontraron con infinidad de surubíes, dorados, bagres y sábalos de gran tamaño flotando muertos en el río.

"Los ingenios esta contaminando nuestro río", dijeron los pescadores, y sin más explicaciones ante el dantesco estrago ambiental apuntaron hacia posibles emisiones contaminantes de los ingenios azucareros de la región.

Noticias similares llegaron desde el río Lavallén, en Jujuy, que en Salta toma el nombre de San Francisco. Los pescadores jujeños denunciaron también la mortandad masiva de surubíes de gran tamaño. "Un surubí necesita de 9 años para llegar a la madurez y poder reproducirse. Surubíes de casi un metro de largo, como los que se vieron flotando muertos, tenían seguro 11 o 12 años de vida", comentaron.