El exintendente de Santa Victoria, en el extremo oeste de la provincia, Lino Flores, visitó la redacción de El Tribuno para aclarar algunos puntos que a su entender estaban en la sombra. "Desearía comenzar diciendo que de los 23 parajes que tiene la jurisdicción de Santa Victoria, en cada uno de ellos realicé una obra como puestos de salud, salones comunitarios, caminos consolidados, dado que es tan difícil la geografía que tenemos en el municipio que es fundamental contar con accesos adecuados y que estén transitables todo el año".

"Y todas las obras que fueron iniciadas se terminaron contando con los certificados habilitantes de Obras Públicas de la Provincia y todos los requisitos necesarios", dijo Lino Flores, exintendente de Santa Victoria, ante las denuncias de malos manejos financieros realizadas por su sucesor, Víctor Santos Quispe.

"Y todo lo hice con amor por mi pueblo y por mi gente, porque yo llegué aquí a la capital con 14 años y en ojotas, recién salido de 7´ grado y volví preparado, siendo maestro mayor de obras y con la impronta de darle a mis vecinos la mayor cantidad de adelantos y mejoras posible, dada mi experiencia de 18 años en Obras Públicas de la Provincia", agregó el dirigente.

"No se entiende"

Luego, explicó que no entendía la razón por la cual Quispe salió a hacer denuncias respecto de que la gestión anterior había dejado las cuentas de la comuna en rojo. "Con las cuentas en la mano, le puedo decir al actual intendente que deberían haber entrada en el mes de diciembre unos $3,7 millones, dinero con el cual podía pagar con absoluta tranquilidad los sueldos y el aguinaldo, tal como nosotros vinimos haciendo durante cuatro años", dijo Flores.

Más adelante, el ahora exintendente de Santa Victoria dijo: "Entre las obras más destacadas que les dejé a mis vecinos está la ampliación del edificio municipal, de la cual quedaron oficinas aún sin inaugurar de tantas que construimos, para cerrar la herradura que conforma el edificio. Ahora hay un Municipalidad de dos pisos".