En tiempos de balance de fin de año podemos decir que en todo el fútbol argentino fue River el que más se adaptó a los atípicos nuevos tiempos y el que mejor se reinventó en la pandemia que acechó en 2020.

Lo cierto es que el millo es el equipo argentino más ganador desde que retornaron las competencias oficiales de fútbol, incluidas las copas continentales, tras la cuarentena de casi medio año, con una efectividad de casi el 81 por ciento de puntos obtenidos.

River apenas resignó en este lapso 9 unidades en juego, por tres empates y una derrota, sobre los 48 que se pusieron en disputa en los 16 encuentros jugados por el millonario.

La marca lo pone muy por encima del resto de los equipos que superaron la barrera de los 14 partidos oficiales, como Defensa y Justicia, Boca, Racing, Vélez, Lanús e Independiente, que tuvieron también competencia local y sudamericana.

En Parque Patricios, River se impuso con solvencia 3 a 1 a Huracán después del estrés de una llave copera de cuartos de final y mostró otra actuación convincente, con destacadas actuaciones de Nicolás de la Cruz, Gonzalo Montiel y Matías Suárez, entre otros jugadores.

Además, el millonario también es el equipo más goleador en esta etapa, que se inició el 17 de septiembre frente al San Pablo, con un promedio de 2,3 goles por partido: se anotó con 38 festejos en las 16 presentaciones oficiales, siendo el equipo más goleador de la Copa Libertadores con 31 tantos sobre 10 partidos jugados, una asombrosa efectividad y promedio de tres goles por partido.

La única derrota de River corresponde a la primera fecha de la Liga Profesional ante Banfield por 1-3. Después ganó cinco partidos consecutivos, empató ante Argentinos Juniors y volvió al triunfo ante Huracán. Mientras que los otros dos partidos con empates corresponden a la Copa Libertadores en sendas visitas a Brasil, en donde igualó frente a San Pablo 2-2 en la fase de grupos; y ante Paranaense 1-1 en la ida de octavos de final.

Boca, por ejemplo, ganó 8 partidos, perdió 4 e igualó 3 en sus 15 presentaciones, y debe definir la serie de cuartos de final de la Libertadores ante Racing mañana, pero no podrá alcanzar las estadísticas de River, ya que su efectividad está en el 60 por ciento de promedio.

Asimismo, la academia, de buenos números en la Copa Libertadores, con 4 triunfos, 2 empates y solo una derrota, perdió 6 partidos del torneo local y por eso sus números globales quedan lejos de la cosecha del equipo de Núñez.

Defensa y Justicia, Vélez y Lanús, que llegaron a semifinales de la Sudamericana, habían quedado afuera de la zona campeonato del torneo local por la baja cosecha de triunfos en la primera fase del torneo.

Defensa, el equipo que más jugó, ya que tras quedar tercero en la fase de Libertadores pasó a disputar la Sudamericana, en 18 partidos suma 7 triunfos, 5 empates y 6 derrotas.

Por su parte, Independiente, que disputó 14 partidos, quedó con una efectividad de 6 triunfos, 5 empates y 3 caídas al hilo.
 

“Cortaremos pan dulce pensando en partidos importantes”

Tras la victoria frente a Huracán que lo dejó líder en la Fase Campeonato y la clasificación a semifinales de la Copa Libertadores, el entrenador de River, Marcelo Gallardo, aseguró que durante las Fiestas de las próximas dos semanas el plantel solo debe enfocarse y pensar en jugar partidos importantes.

El millonario enfrentará a Arsenal y luego vendrá el Superclásico ante Boca, que en caso de vencer podría depositarlo en la final por el título de la Copa Diego Maradona, para terminar con la sequía a nivel de Liga local que tiene su exitosa gestión de seis años.

“Vamos a estar cortando el pan dulce pensando que tenemos que jugar partidos importantes”, reveló Gallardo, luego del triunfo que lo dejó con cuatro puntos en la zona A, pero líder por diferencia de gol, el primer criterio de desempate.

“Una de las razones por la que intentamos tener un plantel motivado para que haya una competencia sana es que los distintos jugadores se sientan útiles para el equipo”, explicó, para luego destacar: “Después de volver tras tantos meses sin competir ni entrenar normalmente, no era fácil estar en estas instancias y yo quiero reconocer ese esfuerzo que significó estar tanto tiempo sin competir y que ellos estén con la cabeza nuevamente enfocados en esta etapa del año, donde se empiezan a definir cosas.

Pelearemos hasta el final porque cuando llegás a esta etapa querés estar en la cita final”, agregó Gallardo sobre la expectativa en la Libertadores, donde ya ganó dos títulos.