Acceso web El Tribuno:
www.eltribuno.com
Contacto:
Editor: Pablo Juarez
E-mail: pjuarez@eltribuno.com.ar
Teléfono: +54 387 4246200
Por cualquier consulta administrativa o referida al sitio, puede escribirnos a: contactoweb@eltribuno.com.ar
Director: Sergio Romero
Telefono: +54 0810 888 2582
Razón Social: Horizontes On Line SA.
Registro de propiedad intelectual: 69686832Domicilio: Av. Ex. Combatientes de Malvinas 3890 - CP (A4412BYA) Salta, Argentina.
A fines de la semana pasada, los colectivos alteraron el recorrido y en lugar de alcanzar la ruta 68 por la calle Libertad, comenzaron a hacerlo por la 25 de Mayo que pasa por el barrio El Molino. La modificación generó malestar en los vecinos.
5 DE Marzo 2020 - 18:56
Intempestivamente cambiaron de recorrido los colectivos de Saeta que cumplen el servicio de pasajeros entre Salta y Cerrillos. A fines de la semana pasada, los colectivos alteraron el recorrido y en lugar de alcanzar la ruta 68 por la calle Libertad, comenzaron a hacerlo por la 25 de Mayo que pasa por el barrio El Molino. Los vecinos sostienen que el pavimento de las calles del barrio no es apropiado para el paso de los colectivos y por ello advierten que pronto terminarán destrozadas como las del barrio Antártida Argentina. Agregan además, que la calle Libertad hace cuatro años fue reconstruida justamente para que resista el paso de vehículos pesados.
Otro argumento que aportan los vecinos es que "en este barrio hay una gran cantidad de chicos que juegan en las veredas o con sus bicicletas. Ahora es un peligro dejarlos jugar afuera por la velocidad con la que manejan los choferes. Estos hombres prepotentes se creen dueños de la calle”, dice Yolanda, madre de cuatro niños en edad escolar y que vive sobre la calle 25 de Mayo.
Cecilia Oropeza, vecina de la localidad, le adelantó a El Tribuno que “si Saeta no suspende el paso de los colectivos por el barrio, los vecinos cortaremos la calle y nadie pasará por aquí.... Estamos hartos que estos señores hagan lo que se les da la gana. No respetan los semáforos, tampoco las paradas y menos las velocidades máximas. El día que maten a alguien será tarde para lamentos...”.
Finalmente, Roberto, padre de tres varoncitos, aseveró que “los colectivos pasan a gran velocidad sin respetar nada. Es lo que nos faltaba, estamos invadidos por basura, restos de construcción y ahora los ómnibus. La Municipalidad tendría que tomar cartas en el asunto y ordenar y controlar a estos monstruos que pasan a gran velocidad por un barrio de calles estrechas”.