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Uno de los vecinos del barrio Portezuelo le enseña a El Tribuno las rajaduras de la pared de contención. Foto: JAVIER CORBALÁN
El problema es de vieja data pero en los últimos 20 días se agravó por una pérdida gigante de agua. El jueves escucharon que el paredón crujía y piden que las autoridades tomen cartas en el asunto.
2 DE Enero 2021 - 18:58
“Es grave, es muy grave”. Así definió uno de los vecinos del barrio El Portezuelo la preocupante situación que atraviesan con el muro de contención en el pie del cerro San Bernardo y que recubre sus viviendas.
Denuncian que el paredón “se viene abajo” en cualquier momento y que el deterioro se agravó a raíz de una gran pérdida de agua originada en una calle colindante que se encuentra varios metros más arriba.
Omar Panique, uno de los vecinos afectados, contó a El Tribuno que el muro fue levantado en los años 80 y que fue reconstruido por la Provincia en varias oportunidades. “Si el paredón cede, se nos tapa la casa”, expresó afligido.
El muro es propiedad del Estado y contiene el cerro. En la época estival el problema ha sido una constante ya que las lluvias arrastran sedimentos y malgastan su formación. Pero a esto se le suma otro gran inconveniente: unos 30 metros más arriba, sobre calle Teniente Luis Fuentes, las cañerías se rompieron y pierden agua en gran cantidad, acelerando el desgaste y provocándole grietas cada vez más grandes.
Ese mismo muro presenta inconvenientes que son de vieja data. La vez anterior que se desmoronó ocurrió en el 2004. “En ese momento vinieron todos, Defensa Civil, la Policía y el Ejército, que le dio una media solución apuntalando el cerro con la estructura de un puente bailey”, recordó Omar.
El entonces procurador de la provincia, Aldo Rogelio Saravia dio órdenes a la Municipalidad de Salta para reconstruirlo, lo que finalmente se concretó dos años más tarde.
Pero en los últimos meses comenzó a sufrir nuevamente serios daños. “Se volvió a romper, se rajó entero, el grave problema es que están todas las cañerías rotas”, describió Panique.
“Estamos seguro que el problema es de las cañerías de agua potable que están en la calle que va por arriba, porque un vecino compró una casa y entraron los camiones de una empresa constructora y rajaron más al pavimento, terminaron de romper las cañerías y el agua emana como si fuera una catarata”.
El 26 de diciembre, una de las damnificadas realizó una denuncia en contra de la empresa constructora y de Aguas de Salta. “En ese momento nos atendió el oficial Gallardo y nos dijo que está todo en la fiscalía que contiene a los barrios de la zona, entre ellos Villa Mitre. Ellos tienen que dar la orden”.
Días después, el 31 de diciembre precisamente, los vecinos se asustaron cuando escucharon crujir el paredón. “La Policía concurrió, dijeron que ya venían los de Defensa Civil y de la Municipalidad, pero no vinieron. Eran las dos de la tarde”, dijo Omar recordando que se trataban de las horas previas al Año Nuevo.
El muro de contención mide 7 metros de alto y aproximadamente 170 metros de largo, cubriendo el patio de unas diez viviendas.
Y el pedido desesperado de los vecinos es doble: “Pedimos que apuntalen otra vez al paredón, se va a formar un alud, hay riesgo de vida”, dijo por un lado y reforzó: “Necesitamos que se cambien las cañerías. Se dañaron en los últimos dos años y empeoró en los últimos 20 días”.
Omar y la gente del lugar solicita que se haga presente el estado provincial y municipal, “para que vean el problema”, pero también requieren de la solución de Aguas del Norte. “Dijeron que van a cambiar no se cuántos miles de metros de caños, bueno, creo que deberían comenzar por acá”.