Sueño cumplido. Los árbitros salteños del Sindicato de Árbitros Deportivos de la República Argentina (Sadra) ya tienen su propia casa luego de años de esfuerzos y permanentes sueños.
Es que gracias al aporte total del secretariado nacional, encabezado por Guillermo Marconi, ayer quedó inaugurada la sede central en el pasaje Bolivia 505, a metros de Buenos Aires al 1200, una casa de dos plantas con amplias comodidades y que se suma a otras 10 entidades que Sadra nacional ayudó a inaugurar en las provincias en estos dos últimos años.
De esta manera, y con la presencia de los dirigentes y árbitros salteños, se llevó a cabo ayer tarde el corte de cintas.
En ese sentido, Marconi destacó que “les agradezco a ustedes porque eligieron una hermosa casa para albergar a toda la familia salteña del arbitraje”. “Esto me gratifica, porque ver el esfuerzo que hacen todas las filiales del país, nos permite redoblar la ayuda y las apuestas para el crecimiento. El esfuerzo personal de cada uno de ustedes es la cosecha de 34 años de permanente lucha y trabajo en todo el país”, concluyó.
Por su parte, el secretario general de la entidad en Salta, Gustavo Gómez, aseguró que “es un gran logro, ya que llevamos 30 años como institución y es un sueño hecho realidad y hoy podemos disfrutar de la casa propia.
Esto es un esfuerzo de todas las camadas, las que están pero, principalmente las que pasaron por Sadra, y si bien el trabajo es largo lo festejamos todos”, resaltó el dirigente.
“Para el 2022 tenemos muchas expectativas, pero siempre va a depender de la situación sanitaria. Lo bueno que la reapertura te crea un clima propicio, pero hay que ser cauteloso. Esperemos que podamos estar todos en las canchas, que es lo que queremos”, resumió.