Nuevamente los pobladores de Los Toldos quedaron aislados y sin la posibilidad de cruzar a Bolivia para conectarse luego hacia el resto de Argentina debido a los problemas causados por las lluvias de las últimas horas que provocaron la crecida del río en la cuenca alta del Bermejo y que dejaron fuera de operaciones al puente Bailey.

Debido a la crecida de la naciente del río Bermejo que se dio en la noche del marte, el relleno (terraplén) que realizaron para conectar el puente en la salida hacia Bolivia luego del anterior deterioro, fue destruido por la correntada.

Este terraplén había sido construido en medio de la playa y el río volvió a tomar su cauce, por lo que el puente quedó cortado una vez mas.

A fines de enero las aguas del río Bermejo se habían llevado la estructura que sostenía el puente Bailey y que comunicaba la población argentina con el vecino país de Bolivia.

Personal técnico de Vialidad de la Provincia había analizado la situación del paso al poblado y los trabajos posteriores lograron recuperar el tránsito, pero esas tareas solo duraron unos pocos días.

Residentes de esta localidad enviaron un video en exclusiva para El Tribuno, donde se podía advertir la fuerza y el caudal con el que bajan las aguas del Bermejo y que, lamentablemente, dejaron incomunicada a esta localidad una vez mas.

Personal técnico de la Dirección de Vialidad de Salta llegó al lugar apenas ocurrido el incidente anterior, trasladando también maquinaria para iniciar las tareas de recuperación una vez que baje el caudal del río.

En aquella ocasión la crecida cortó el terraplén de acceso al puente del lado de La Mamora (Bolivia) y socavó el estribo, también del lado del vecino país, provocando la inclinación del tablero del puente (por donde transitan los vehículos).

Las intensas lluvias del lado boliviano provocaron la crecida del Orozeño, que luego, en la unión con el río El Candado en el lado argentino, alimentan al Bermejo en la cuenca alta.

Con la nueva crecida del río los vecinos de Los Toldos ven nuevamente resurgir problemas por los que vienen reclamando hace años y que tienen que ver con la conexión por tierra con el resto del país. La falta de rutas por territorio provoca constantes reclamos.

Desde que empezó la pandemia no pueden regresar legalmente, ya sea como peatones o en sus vehículos particulares, porque las autoridades bolivianas no lo permiten, ya que tienen que hacer obligados el paso internacional Aguas Blancas - Bermejo, luego transitar 95 kilómetros por Panamericana N´ 1 del Estado Plurinacional de Bolivia, para luego reingresar a nuestro territorio.

Con la frontera cerrada por el puente internacional pasan proveedores de mercaderías, pero bolivianos hacia la Argentina, ambulancias, policías, guardaparques, además de los jerárquicos municipales, aunque los pobladores que necesitan mercaderías, salud, hacer trámites en la ciudad de Orán, no pueden pasar legalmente de país a país.

Durante casi dos años los vecinos siguieron todos los pasos formales ante las autoridades para poder tener un régimen especial parar salir a Bolivia, tomar la ruta Panamericana y reingresar a la Argentina por el puente internacional Aguas Blancas - Bermejo, pero sin repuesta.