El festejo fue inolvidable para Daniel Díaz, quien una vez que cruzó la bandera a cuadros realizó un par de cuadras para detenerse y ser abrazado por toda la gente que corrió detrás de él para felicitarlo.
“No creo que rompí el maleficio, fue suerte, siempre dije que para cualquier victoria se precisa suerte, en algún momento se tenía que dar y hoy (por ayer) se dio, así que más que feliz”, comentó Díaz a El Tribuno.
De todas maneras para el salteño este triunfo fue saldar “una deuda pendiente”.
“Llevo muchos años corriendo, esta victoria siempre estuvo pendiente, se puede decir que la pude saldar. Era una deuda pendiente que tenía, como salteño la tenía entre cejas pese a que no es el circuito ideal para mí, por mis características. Tuve el apoyo de la familia Postigo”, remarcó el ciclista de la Selección de Salta.
Emocionado y con el cansancio físico y mental que significó ganar esta 90ª edición de la Clásica, Daniel Díaz comentó sus sensaciones tras un histórico triunfo.
“Pasar la bandera a cuadros fue indescriptible, las sensaciones que tuve al cruzar la meta, me pasó de todo por la cabeza”, sintetizó Díaz.
Por último, el ciclista, que llegó a la Clásica tras ganar la “Vuelta del Valle”, en Catamarca, volvió a recordar lo que fueron sus participaciones en las últimas ediciones.
“Salta se merece una alegría así, es lo que uno puede dar, es lo que se hacer. Se tenía que dar, lo intenté durante varias ediciones, fui cuarto la edición pasada, séptimo en dos ediciones y esta vez se me dio”, expresó el flamante ganador de la Clásica 1º de Mayo que se suma ahora a la larga lista de campeones de la tradicional carrera.

• La euforia de la gente es increíble

Para la familia Postigo, esta edición fue muy especial, Don Osvaldo Postigo incluso remarcó que fue la mejor para él, en años.
“Son 90 años de la Clásica, es una alegría tremenda, se tuvo que suspender solo un año por la pandemia pero ahora ver la euforia de la gente es algo increíble. Esto no lo ví nunca y eso que tengo muchas ediciones encima, la verdad que este año fue increíble”, sostuvo Osvaldo Postigo, quien antes de la consagración de Daniel Díaz, deseaba que un salteño corte con los 27 años de sequía: “Tenemos más de veinte años sin que un salteño gane la carrera, ojalá que al menos tengamos un salteño en el podio que sería una gran alegría para nosotros”.
Por las calles de Salta hubo mucha gente que apoyó a los ciclistas pero uno en particular, Cristian Guaymás, representó a Central Norte y en varios sectores de la ciudad se vieron pasacalles de la institución azabache, alentando al “ciclista cuervo”. Guaymás terminó entre los mejores salteños en la competencia y se llevó $6.000.
“Por todos lados me alentaban, con las banderas, la verdad que eso me dio un plus para seguir en el pelotón de adelante”, dijo Guaymás.