La inflación escala sin frenos en todos los rubros, principalmente el de la carne. Atrás quedaron las largas filas de domingo en los supermercados salteños, de clientes que sacaban número y buscaban darse un gusto con un asado familiar.

Ahora el panorama es muy distinto: se observan apenas entre 10 y 15 personas que esperan para comprar cortes de carne y algunos solo consultan precios para comparar y se van, según un relevamiento de El Tribuno realizado ayer en supermercados de la capital.

En un hipermercado ubicado en cercanías a la rotonda de Limache, en la zona sur, hay bandejas dispuestas en heladeras. La mayoría de los clientes se vuelca a comprar bajo esa modalidad. Se ofrecen bandejas con cortes de novillito, por kilo: el peceto, la colita de cuadril y la tapa de cuadril cuestan 1.599 pesos; mientras que el matambre, la tortuguita y el cuadril salen 1.499 pesos. En tanto, la tapa de nalga cuesta 1.399 pesos, el roast beef tiene un valor de 1.369 pesos, la tapa de asado sale 1.299 pesos y la aguja está a 1.029 pesos.

"Estoy llevando dos ofertas de costilla. Cada una sale 800 pesos. La nalga de novillo también está así y el puchero de osobuco con hueso sale 900 pesos el kilo. No son las ideales. Tienen algo de grasita, pero es lo que puedo. La verdad es que durante la semana comemos pollo, costilla de cerdo, tarta de verdura, pastel de papa y casi nada de carne", contó Francisco Reyes desde el hipermercado.

Y agregó que en la carnicería de su barrio, Scalabrini Ortiz, la carne es mucho más cara que en el súper, por eso opta por ir a este lugar.

En una heladera con carteles amarillos que dicen "Económicos" está el kilo de colita de cuadril a 1.329 pesos y el de bola de lomo de novillo y el de cuadrada de novillo a 1.299 pesos.

Pocas ofertas

En el sector carnicería de otro supermercado sobre la avenida Ex Combatientes de Malvinas el kilo de peceto de novillo cuesta 1.499 pesos y el de vacío 1.479 pesos, mientras que el lomo o filet de novillo está a 1.450 pesos.

Un poco menos cuesta la colita de cuadril, que tiene un valor de 1.399 pesos el kilo. En tanto, el kilo de tapa de asado está a 1.329 pesos.

Otros cortes más económicos son la palomita y la paleta de novillito. El kilo del primero tiene un precio de 1.179 pesos y el segundo está a 1.129 pesos. En esta misma línea se encuentra el bife angosto. Sale 1.199 pesos el kilo.

En el supermercado solo hay carteles sobre dos ofertas: el kilo de lomo en tira a 1.159 pesos y el de costilla a 969 pesos.

"La situación ya no es como hace muchos años donde casi todos podían comprar y comer carne. Hoy comer carne es un lujo y más si es un asado. Hay clientes que los vemos siempre y se llevan buena carne porque les da el bolsillo, hay otros que llevan los cortes más baratos que no son de tan buena calidad y hay otros que vienen a preguntar precios para comparar nada más y se van y te dicen que van a volver más adelante", dijo un empleado.

Una clienta, Gabriela Escalante, quien vive en el barrio Limache, contó que ante la crisis económica opta por hacer compras "hormiga".

"Yo compro lo que necesito para el día. Ahora me estoy llevando una bandeja con bifecitos que voy a hacer con fideos y así hago con todo. Compro carne, verdura, solamente para el día porque siento que es lo que más me conviene", explicó la mujer.

Ranking de aumentos

Según el informe del Indice de Precios al Consumidor (IPC) del Indec, correspondiente a abril pasado, la carne, sus derivados y lácteos ocupan el segundo puesto en el ranking de subas. Aumentaron entre un 6 y 8 por ciento, según la región de país.

Pese al acuerdo de precios que el Gobierno firmó con frigoríficos por algunos cortes seleccionados, el precio de la carne vacuna igual se disparó. Según el informe del Indec, el asado subió un 5,2%, la carne picada 9,8%, la nalga 7,8% y el cuadril 7,7%. En la lista de los productos que más aumentaron, en primer lugar está el pan y cereales que subieron entre un 8 y 10 por ciento, según la provincia.

El tercer lugar es para la leche, lácteos y huevos: subieron entre un 7 y 8 por ciento. Le sigue el aceite y la manteca que escalaron entre un 6 y 15 por ciento. En quinto lugar están las frutas y en sexto lugar las verduras.

La inflación de abril fue de 6%. De esta forma, la variación interanual trepó a 58% y se transformó en la más alta en 30 años, quebrando los registros desde la hiperinflación previa a la convertibilidad.