El potencial que tiene Salta para la generación de energías renovables es inmenso. Es considerada como uno de los siete lugares del planeta con mayor incidencia solar. Eso le da un condimento especial a la hora de ver a la región para realizar inversiones que están basadas en la creación de parques solares fotovoltaicos.

Con la puesta en marcha y entrada en operación del Parque Solar Fotovoltaico Altiplano 200, junto a la Planta Fotovoltaica de Cafayate y a la generación de energía hidráulica, permitirá alcanzar una generación de energía eléctrica, con fuentes renovables, equivalente al 40% de la demanda de energía de la provincia. Así es como Salta se convierte en líder regional en el desarrollo de las energías renovables.

Juan Veizaga, doctor en ciencias geológicas y secretario técnico de Ciencias Naturales de la UNSa, participó del panel “La transición energética en Salta”. Al principio hizo un breve repaso del desarrollo energético de la provincia y afirmó que Salta fue pionera en el descubrimiento de petróleo y que se hacía de manera rudimentaria a partir del siglo XIX hasta que comenzó la explotación en 1926 por parte de Standard Oil de Nueva Jersey y posteriormente con YPF que se sumó a la actividad petrolera del norte.

Contó durante la conferencia que se realizaron numerosos descubrimientos de yacimientos de gas como el de Campo Durán, en el cual se construyó la refinería y un gasoducto hacia Buenos Aires. También remarcó el descubrimiento del gigante de gas Ramos que estaba ubicado en la ciudad de Tartagal y llegó a ser el segundo yacimiento de gas del país.

“En Salta desde hace ya 30 años no hemos tenido otro descubrimiento de esta envergadura. Otro hito importante que no nos podemos olvidar del embalse Cabra Corral que llegó a aportar el 10% de la energía en Salta. Y también otros proyectos de biocombustible como el de ingenio San Martín o El Tabacal que es un proyecto de biomasa”, expresó.

Hablando sobre el escenario energético expresó que Salta sigue produciendo petróleo y gas aunque aclaró que no hubo grandes descubrimientos y que los yacimientos actuales están declinando.

“Además tenemos centrales fotovoltaica en Olacapato y Cafayate que aportan a la potencia eléctrica instalada que es alrededor de 300 megavatios, mientras que el proyecto ingenio San Martín aporta 40 MV y los aprovechamientos hidráulicos como el Cabra Corral y El Tunal que aportan 110 MV. El potencial eléctrico instalado es del 25% de fuentes renovables, el 7% en hidráulicas y el resto de fuentes fósiles”, expresó el profesional.

Al expresarse sobre el potencial solar que tiene la provincia aseguró que Salta es famosa y conocida por ser un lugar minero, pero afirmó que también se puede decir que es solar porque tiene un enorme potencial, además de otras fuentes de energías renovables.

“Tenemos la suerte de tener una provincia que es muy rica en recursos naturales que tienen un altísimo potencial y es cierto que estamos usando una parte muy pequeña de todo ese potencial, diría que es menos del 10%. Salta está ubicada en un sector donde la irradiación solar es muy alta por lo cual se constituye en una de las siete regiones a nivel mundial con mayor potencial solar”, remarcó.

Hay un enorme potencial solar, una energía limpia y menos costosa

Explicó que la idea no es reemplazar los combustibles fósiles por energía renovable.

Planta Fotovoltaica de Cafayate.

El especialista durante la conferencia que se desarrollo en el Centro de Convenciones advirtió que se debe usar la energía solar porque es la más limpia de las fuentes de energía, además de ser la más respetuosa con el medio ambiente, la más eficiente y a través de los años la menos costosa, es por eso que pidió desmitificar que la energía solar “es cara”. Juan Veizaga habló del por qué se está dando esta transición energética. Explicó que una de las razones es el cambio climático porque los combustibles fósiles actualmente es el principal responsable de las emisiones de efectos invernaderos y que el planeta tierra ya se ha calentado más de 1° que en los períodos preindustriales. “¿Por qué la transición energética? Por el cambio climática, entre una de sus razones”, agregó.

“La idea no es reemplazar una energía por otra, definitivamente no, la idea es transicionar hacia otras fuentes de energía. No queremos reemplazar a los hidrocarburos completamente por energías renovables sino que queremos aumentar nuestra participación. En la universidad también se está invirtiendo en métodos y técnicas que limpian la industria hidrocarburífera tomando el dióxido de carbono, que es emitido y convirtiéndolo en fuentes de energía”, aseguró Veizaga.

Además, el especialista destacó los proyectos que se llevan adelante en el Instituto de Investigaciones en Energía no Convencional (Inenco) de la UNSa. Resaltó el uso de los calefones solares que se vienen estudiando hace muchos años y aseguró que es una tecnología “madura” y que está “lista” para implementarse en todos los hogares.