Crece la preocupación de los pescadores salteños por la falta de carnada viva. Días atrás -comentaron- hubo una serie de inspecciones a los catamaranes del dique Cabra Corral, para desalentar su uso.

Sobre este punto, vale la pena recordar que la normativa vigente establece que queda totalmente prohibido el transporte de carnada viva de un ambiente acuático a otro, a fin de evitar la introducción y esparcimiento de especies dañinas o perjudiciales.

Solo se podrán utilizar como carnada viva aquellas especies cuya extracción este autorizada para cada ambiente.

Pero, como no se puede asegurar la procedencia de cada carnada, surge el inconveniente. “Eso nos dijeron de Lacustre”, contó Cacho, un asiduo concurrente al espejo de agua más grande del norte.

El hombre recordó que “históricamente se vendió carnada en distintos puntos de El Carril y Coronel Moldes. Los peces más utilizados para este fin son los llamados piojitos (mojarras diminutas), mojarras, bocachas, pejerrey fileteado, camarones, anguilas y uncas (lombrices)”.

Pablo, alias Salamanca, quien también suele ir con frecuencia a tirar el anzuelo agregó: “Hay familias que viven de vender carnada viva y fileteadita. Los estamos privando de un ingreso importante. ¿Y qué pasará ahora con las uncas. Ahh?. ¿Tampoco las podremos usar? Están empecinados. Quieren que vayamos con la cañita fija de tacuara como principiantes. Me amargan”.

Tampoco estaría habilitado pescar con recursos sofisticados como el polvo de camarón, los aceites coloridos y saborizados o los paternoster de tres anzuelos. Aunque en el ambiente, señalan, "el uso de estos elementos es habitual".

¿Que será de las carnadas?. Aún no se sabe y reina la incertidumbre.