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A dos semanas de asumir un nuevo mandato en la provincia y en medio de la transición a nivel nacional, el gobernador Gustavo Sáenz dialogó en exclusiva con El Tribuno sobre los fondos nacionales para la obra pública, la coparticipación, el pago del aguinaldo y el triunfo de Javier Milei.
26 DE Noviembre 2023 - 23:47
La primera semana de transición tras la elección de Javier Milei como presidente de la Nación generó mucho revuelo en las provincias, sobre todo por el futuro de la obra pública y la distribución de fondos coparticipables. En una entrevista con El Tribuno, el gobernador Gustavo Sáenz afirmó que defenderá la continuidad de la obra pública, incluso dijo que los proyectos contratados son un derecho adquirido. También esta semana se reunirá con los mandatarios de otras provincias para llevar propuestas al equipo libertario que asumirá el 10 de diciembre. Las provincias buscan compensar los fondos que perdieron por el nuevo piso del impuesto a las ganancias.
Sáenz también hizo una lectura política sobre el resultado de las elecciones y dio algunas señales sobre cómo comenzará su segundo mandato.
Sí, bueno, nosotros venimos planteando desde la campaña, antes de los anuncios, antes de esta propuesta, nuestra preocupación porque no solo parar la obra pública significa dejar de hacerla, sino que también produce y genera una cantidad de fuentes de trabajo que se pierden. Estos puestos se lograron después de mucho tiempo. Obras también muy importantes para la provincia que han sido de mucha gestión, de mucho trabajo, como las rutas 51 y 9/34, el puente Salta-Vaqueros, y puedo enumerar una cantidad impresionante de obras que están en ejecución y otras que han sido licitadas y están próximas a ejecutarse. Viviendas, que para nosotros son fundamentales, cloacas, acueductos, gasoductos, son obras que dignifican a la gente y que durante mucho tiempo no han sido tenidas en cuenta en el norte. Y bueno, haberlas logrado para nosotros es un derecho adquirido y vamos a pelear hasta el último para que las mismas se hagan. No es la misma situación la del centro del país que la del norte de la provincia, que ha sido postergado por la mayoría de los gobiernos nacionales. Esperamos que esto no ocurra. La paralización de la obra pública también genera que se pierdan muchas fuentes de trabajo y muchas familias se queden sin el sustento de cada día.
Bueno, los contratos tienen que ver con eso y hay que cumplirlos, sea entre privados o sea entre el Estado y los privados. De hecho, así como hay que cumplir con el Fondo Monetario Internacional (FMI), primero también hay que cumplir con los salteños, que tienen una deuda histórica y hay que pagarla. Es entendible que a partir de ahora el nuevo gobierno tiene que equilibrar las finanzas, tiene que bajar el déficit fiscal, pero tiene que haber un equilibrio entre las necesidades de la gente y los parámetros que establece el FMI para poder cumplirlos. Así que yo creo que va a haber mucho diálogo.
Tuve la posibilidad de hablar con los futuros ministros del Interior y el jefe de Gabinete, y de plantearles esta inquietud, esta preocupación que no es solo mía sino de todos los gobernadores, de frentes provinciales como en mi caso, del Frente de Todos, de Juntos por el Cambio, en fin, de todos los gobernadores. Es que en definitiva las obras que están en marcha son fundamentales para el crecimiento y la infraestructura que debemos tener en el norte para poder ser lo que somos. Salta es una provincia pujante, es una provincia llena de oportunidades, pero a las oportunidades hay que acompañarlas con obras, con infraestructura y, por sobre todas las cosas, hay que defender aquello que consideramos nos corresponde por haber dejado tanto tiempo de lado al norte, que realmente necesita inversiones de este tipo. La Provincia no puede hacerlas si no es adquiriendo créditos, yo no lo hice y no lo voy a hacer tampoco, porque después nos termina saliendo carísimo a los salteños. Nos costó muchísimo conseguir fondos federales, detrás de cada obra hay un grupo de trabajo técnico que va y viene hasta que se consigue el financiamiento. Es todo un tema administrativo y de burocracia, y bueno, no vamos a permitir ahora que nos quedemos sin estas obras. Así que yo creo que la cordura, el diálogo, la templanza, la prudencia, la responsabilidad van a llevar a que sí quizás tengamos que priorizar alguna de ellas o si no se pueden hacer en un año se pueden hacer en dos o en tres, pero la obra tiene que continuar. Nosotros entendemos que son obras prioritarias y por sobre todas las cosas que dignifican a los salteños. En este caso también hablamos de escuelas, muchas están en ejecución, otras ya están terminadas, gracias a Dios. Hablamos de hospitales, viviendas que, te vuelvo a repetir, desde el 2017 no se entregaban y tenemos un montón de viviendas ejecutándose en toda la provincia. Tenemos la Ciudad Judicial en Orán, el Centro de Convenciones en Cafayate, plantas depuradoras, plantas de todo tipo, el aeropuerto y muchísimas obras más. Esperemos poder llegar a un acuerdo. Yo creo en el diálogo, por sobre todas las cosas, está la oportunidad de que podamos construir una Argentina que realmente nos dé las mismas oportunidades a los que viven en el centro del país que a aquellos que vivimos en el norte.
Sí, mostraron apertura, voluntad de diálogo, fue muy cordial la reunión. También me comprometí a hacer una reunión un poco más amplia con otros gobernadores que quieren tener la posibilidad de plantear sus problemas e inquietudes. Estamos en un momento que recién se están definiendo quiénes van a ocupar cada uno de los ministerios. Hay incertidumbre, un día se dice una cosa y otro día se dice otra, y hasta que no esté elevado el Presupuesto al Congreso y sepamos bien cuáles van a ser las prioridades y las metas que tiene el próximo Gobierno se nos hace muy difícil a los gobiernos de la provincias, totalmente dependientes de la coparticipación del Gobierno nacional, saber qué es lo que vamos a poder hacer nosotros. Así que estamos a la expectativa, con mucha incertidumbre, pero con esto que le digo, con la esperanza de que haya un diálogo profundo, que sea una Argentina de consenso, que prime el diálogo por sobre todas las cosas, la armonía y que conservemos la paz social, que es lo más importante para conservar en estos tiempos y acompañar al gobierno en todo lo que tengamos que acompañar para que le vaya bien, porque el éxito del gobierno es el éxito de todos los argentinos. Y ponernos firmes cuando nos tengamos que poner, de hecho yo ya lo he mostrado en distintas oportunidades con los distintos gobiernos nacionales, cuando he tenido que acompañar he acompañado y cuando me he tenido que oponer lo he hecho y claros ejemplos son el juicio a la Corte Suprema con el que no estuve de acuerdo y no acompañé, cuando me opuse al tratamiento de la ley de humedales, cuando nos opusimos también con Gerardo Morales y Raúl Jalil y pusimos toda la fuerza suficiente, cuando a algún iluminado a nivel nacional se le ocurrió presentar un proyecto de ley para determinar que el litio se nacionalice, cuando claramente la Constitución establece que los recursos naturales son de la Provincia. Todas estas cosas son las que van pasando y por eso es que siempre exhorto a los diputados y a los senadores nacionales que representan la Provincia que antes de atender u obedecer a cualquier esquema partidario, piensen en Salta, en los intereses de los salteños que es el compromiso que tenemos. En el caso mío yo lo he demostrado siempre y por eso les pido que antes de levantar la mano en contra de los intereses de los salteños, piensen mucho porque en definitiva primero tiene que estar Salta. A mí me han etiquetado de un lado y del otro, me dicen "vos sos de acá, vos sos de allá", no, yo soy salteño primero que nada, defiendo los intereses de los salteños y ese es mi norte y ese es mi compromiso y mi responsabilidad ahora y siempre.
Los presupuestos se basan de acuerdo al Presupuesto nacional, hasta que no esté presentado no sabemos en qué condiciones y cuáles van a ser los parámetros y las prioridades que va a establecer… A nosotros se nos hace muy difícil armar un presupuesto si no tenemos la certeza de saber con qué fondos vamos a contar a nivel nacional, con qué obras vamos a contar y hasta que no se determine todo esto no podemos avanzar. También hice el planteo por el tema de la coparticipación, en la campaña dijeron que la iban a sacar, y bueno claramente esto es imposible porque está en la Constitución. Y la Constitución también establece claramente, la de 1994, que hay que buscar criterios objetivos de reparto. Hasta el día de hoy, después de casi 30 años, nunca se hizo y esto debe hacerse porque si realmente queremos tener argentinos en igualdad de condiciones y con las mismas oportunidades, tenemos que ver claramente de que en algunas provincias el ingreso per cápita por coparticipación de habitantes es mucho más grande. Esto es inentendible e inexplicable por eso creo que hay que establecer criterios razonables y objetivos de reparto y respetar la Constitución. Así como soy un ferviente defensor de la República, de la división de poderes, también soy un ferviente defensor del federalismo. Nuestro sistema es representativo, republicano y federal, y federal no solo para decirlo sino para practicarlo. De una vez por todas dejemos de lado esta Argentina que tiene una visión absolutamente centralista, que todos los subsidios, los privilegios se los lleva el centro del país y nosotros tenemos que andar mendigando para que nos den lo que nos corresponde como argentinos y poder avanzar como provincia.
Nosotros tenemos muchos compromisos a futuro. Tenemos que pagar el primer vencimiento de 32 millones dólares del Fondo Bicentenario, crédito internacional que habíamos reestructurado esa deuda y tenemos que pagarlo en dólares ahora en los próximos días. Tenemos previsto también la posibilidad de pagar el aguinaldo en tiempo y forma, pero le vuelvo a repetir también todo depende de la remisión de fondos de Nación.
Tenemos que hacer una lectura clara de lo que han sido las últimas elecciones. Es importante que lo hagamos todos aquellos que tenemos la responsabilidad de gobernar. Claramente la gente, debido al hartazgo, al cansancio, la desesperanza y la desilusión de la clase política, ha llevado a que elijan un cambio, un cambio absolutamente distinto, drástico, diferente y de fondo, porque las propuestas son realmente extremas. Esperemos que estas propuestas también sean analizadas con los demás. Pero bueno, la gente ha votado un fin de ciclo y esto hay que reconocerlo. La gente se cansó tanto del gobierno anterior como de este gobierno y de la etapa final del kirchnerismo. Esto debo reconocer porque muchas veces se malinterpreta. Yo he tenido la posibilidad de ser candidato a vicepresidente de Sergio Massa en el 2015 y la posibilidad de mostrarle las necesidades que tiene el norte. Massa ha venido en varias oportunidades a Salta, conoce los problemas y esto trasciende la política, mi amistad con él, esto es de público conocimiento. Entonces cuando me preguntaban qué es lo que más les convenía a Salta y claramente me convenía mucho más tener un amigo con el que tengo relación constante y que conoce los problemas para que nos ayude. Pero bueno, la gente eligió libremente y dejó un claro mensaje.
Ahora Massa en este partido jugó de arquero defensor, mediocampista, delantero, hizo goles, atajó 200 mil penales mientras el Presidente y la vicepresidenta no se hablaban, en un gobierno absolutamente dividido y sin dialogar. Esto hizo que la elección que llevó adelante fuera épica y realmente digna de destacar. Cerca del 44 por ciento en este contexto hay que destacar. Y también destacar claramente a los salteños que yo nunca fui kirchnerista, no soy kirchnerista, nunca lo fui. De hecho el kirchnerismo siempre me puso un candidato en contra para cada elección y trabajó desde la oposición, y lo siguen haciendo y me parece correcto que así sea. Pero bueno en estas circunstancias donde no había que elegir, sino había que optar, yo opté por mi amigo porque me parecía que era lo que correspondía.
Sí hablé con él, lo felicité por el gran esfuerzo que hizo, porque no solo se cargó al hombro el gobierno y la economía en el momento más difícil, cuando todo el mundo se escondía y nadie quería hacerlo. Encima se puso al frente de una campaña en un momento difícil, lo que lo hace mucho más valorable. Cuando algunos decían que se iba a ir del Ministerio yo pensaba… No lo conocen a Sergio… Sergio va a estar hasta el último día y va a garantizar que sea una transición en paz.
Desde que asumimos hicimos la reducción correspondiente en el Estado, bajamos la cantidad de ministerios, secretarías y muchas otras cuestiones más. En mi gestión no hubo viáticos al extranjero, muchísimas cosas ajustamos, que más que nada son gestuales, porque tampoco son significativas en cuanto al Estado, pero son buenas para que la gente vea que estamos acompañando como debemos hacerlo a una situación crítica que están viviendo la mayoría de los argentinos. Todo lo que haya que acortar y achicar, vamos a ir achicando y acortando porque también la situación es difícil y hay que enfrentar temas que son prioritarios y hay otros temas que no son prioritarios que pueden esperar. Seguramente vamos a ir en el transcurso de este tiempo haciendo los ajustes que haya que hacer, acompañando estas políticas porque primero es lo que la gente quiso, la gente quiere. Yo en definitiva creo que es un mensaje claro de la gente para que los escuchemos, nos pongamos al lado de ellos y que veamos cuáles son las necesidades reales, que no son el juicio a la Corte, que no son las elecciones, que no son los problemas de los políticos, sino que los problemas reales son la inflación, la falta de trabajo, la seguridad y tantas otras cosas más que tenemos que ocuparnos de una vez por todas. Pero vuelvo a repetir, dejando de lado esta grieta tan dura que tanto daño le hizo a los argentinos, esto de que opinar distinto que sea un delito o que no podamos hablarnos entre lo que opinamos distinto y en una misma mesa, con humildad y grandeza y consensuar políticas para sacar adelante a la gente.
Sí, nosotros fuimos cambiando a medida que transcurrieron estos cuatro años que han sido muy difíciles para todos. Tuvimos que enfrentar la desnutrición en el norte, después la pandemia, la crisis económica, la guerra (Rusia - Ucrania), los incendios, la crisis sanitaria y un montón de cosas. También la crisis hídrica que hemos ido resolviendo y trabajando con obras en distintos lugares. Fuimos cambiando funcionarios, a quienes les agradezco, porque han estado en los momentos más duros, acompañando a este gobierno. Hemos ido modificando algunos ministerios, algunas secretarías. Seguramente antes de fin de año también vamos a hacer algunos cambios, pero también todo depende de ver cómo terminan siendo los ministerios a nivel nacional, quiénes los que conducen y de acuerdo a eso también buscar las personas que tengan un perfil por lo menos parecido para que puedan trabajar de manera conjunta con Nación y podamos mediante el diálogo, el consenso y la armonía poder sacar adelante la provincia.
Por eso yo digo que todo tiene que ver con una Argentina donde prime el diálogo por sobre todas las cosas y no la política de la extorsión, el apriete constante. Creo que cuando se dialoga se llega a puntos de encuentro, puntos en común. Tampoco tiene que haber fundamentalismo de un lado ni del otro, ningún fundamentalismo es bueno. O sea, aquel que cree que es dueño de la verdad se equivoca. Aquí hay que escucharnos por sobre todas las cosas y consensuar las políticas. Esa es la democracia, el arte de dialogar a fin de construir consensos y es lo que tenemos que hacer con los sindicatos, con todos aquellos que integran la sociedad civil organizada. Espero que todos nos demos cuenta del hartazgo que también hay en la gente y que en definitiva podamos llegar a soluciones que puedan llevarse adelante. Muchas veces los pedidos son exagerados o van más allá de lo que podemos acompañar desde el gobierno y se nos hace difícil. Nosotros lo hemos planteado, el tema de liberar la mitad de las calzadas, de garantizar el derecho a la huelga y a la protesta, pero también de garantizar el libre tránsito y la posibilidad de que siga trabajando aquel que no tiene nada que ver con la protesta. O sea, lo hemos hecho y lo hemos planteado en su momento y hemos tenido inconvenientes y cuestionamientos de todo tipo, pero nosotros ya todo esto que ya lo veíamos venir, lo hemos planteado y lo hemos puesto a discusión. La gente, con toda razón, la mayoría, ha planteado la necesidad de poner orden, la necesidad de garantizar seguridad, la necesidad de que haya cambios importantes que en definitiva beneficien al común de la gente, al que todos los días sale a laburar, al que no tiene un cargo en la administración pública y la posibilidad, que hoy es un privilegio de cobrar todos los meses. También aquellos que tienen que cuidarlo, por sobre todas las cosas, y agradecerle a Dios que lo tienen, porque hay muchos que la están pasando mal, que no consiguen trabajo, que no tienen la posibilidad de crecer y un contexto inflacionario que lamentablemente lo poco que ganan no les alcanza.
Sí, yo me reúno habitualmente con ellos, también lo hago telefónicamente, me voy a reunir seguramente, pero vuelvo a repetir, ante la incertidumbre de lo que está pasando a nivel nacional, hasta que no tengamos certezas, hasta que no sepamos qué es lo que se van a hacer, porque todo esto es una cadena: lo que se presupuesta a nivel nacional después se replica en Provincia y después en cada uno de los municipios. Lo que sí me voy a reunir con los gobernadores de distintos signos políticos para llevar adelante propuestas y pedidos para que podamos garantizar la coparticipación. Aunque vuelvo a repetir está garantizada por la Constitución, también para que podamos recuperar de alguna manera lo que hemos perdido con la eliminación del impuesto a las Ganancias.
Y bueno, todavía no hemos hecho los cálculos, pero entre 4.000, 4.200 millones por mes, es lo que perderíamos con la eliminación del impuesto a las Ganancias. Que le aclaro, estoy absolutamente de acuerdo con que se haya eliminado este impuesto, porque esto también lo planteó Massa en su momento, en la campaña, cuando yo era candidato a vicepresidente. El salario no es ganancia, la remuneración no es ganancia, y bueno, lo llevó adelante. Otros lo prometieron y nunca lo hicieron.
Lo que falta es la compensación, digamos, que le habían prometido, que salga del impuesto País o el impuesto al Cheque.
Así es, un porcentaje del impuesto al Cheque y un porcentaje del impuesto País. Hay otra propuesta de los gobernadores de Junto por el Cambio, que sea solo del impuesto País y un poco más. Hay que ver cuáles son los impuestos que va a eliminar el futuro presidente y también ver cuáles van a ser coparticipables. Así que es una discusión que se va a dar en estos días y ahí estaremos defendiendo. Va a ser un año complejo, todos lo sabemos, independientemente de quién sea el presidente o a quién le hubiese tocado ser el presidente, va a ser un año lleno de complejidades y vamos a tener que trabajar mucho, dialogar mucho y defender mucho lo que nos corresponde a cada uno para evitar que tengamos un año con crisis social y con crisis política.
Primero estamos viendo la asunción nuestra, qué día va a ser y seguramente si nos dan los tiempos vamos a ir a acompañar, pero todavía no tenemos nada definido. Esta semana sí vamos a estar en Buenos Aires con los gobernadores, conversando distintos temas y planteando propuestas, no solamente llevando exigencias. Yo siempre deseo que a los gobiernos les vaya bien, deseo que a los gobiernos les vaya bien, porque si les va bien a ellos, nos va bien a todos y cuando les va mal, nos va mal a todos.