El fuerte temporal que azotó la ciudad de Salta entre las 21 y las 3 de la mañana, dejó muchos daños en distintas zonas (como en el cerro San Bernardo) y alrededor de 80 evacuados. El asentamiento San Javier no fue la excepción, los vecinos sufrieron destrozos por la tormenta y piden ayuda para mejorar las condiciones insalubres en las que viven. 

Gran parte de las familias, las cuales la mayoría son matrimonios jóvenes con bebes recién nacidos, perdieron colchones, ropa y otros materiales para el día a día. 

Los vecinos, quienes sufren para transitar por el lugar, porque quedó todo lleno de agua, le contaron a El Tribuno cómo es el día después de un temporal de esta magnitud y todo lo que tienen que hacer para salir adelante. 

La dura realidad tras el temporal en primera persona 

Agradecida por poder hablar con un medio para contar la realidad de lo que pasa en el asentamiento San Javier luego de una tormenta, Graciela Fortunato, referente de uno de los sectores del lugar dialogó con El Tribuno y brindó detalles de la odisea que pasaron anoche y esta madrugada. 

"Me gustaría que esto se pueda ver, anoche estuvimos tratando de rescatar un poco de plástico para tratar de ayudar a la gente porque la gran mayoría de los hogares de acá son precarios, construidos con tarima, puntales entre otros materiales", explicó Graciela. Además contó que tuvieron que evacuar a muchas familias, en su mayoría matrimonios jóvenes con bebés, para llevarlos a otras casas de material porque la situación no daba a basto. 

"Necesitamos ayuda del gobierno,por más que digan que es insalubre y no se puede vivir, no tenemos otro lugar hacia donde ir y acá no tenemos ni luz ni agua. Al no recibir ninguna ayuda, nos ayudamos entre los vecinos, cada sector tiene su referente y tratamos de trabajar juntos para salir de momentos así", expresó Graciela, llena de impotencia por lo que están viviendo tras la fuerte lluvia. 

La situación de los evacuados

Erica y Gabriel,una joven pareja con un bebé, dieron detalles dela noche que pasaron bajo la gran cantidad de agua que cayó en Salta. "Fue horrible, la ropa de mi hijo se mojó y hay muchas familias que pasan por lo mismo, es muy feo llegar y ver todo mojado y dormir con el colchón mojado como nosotros anoche, todo lleno de barro y de agua", dijo ella. 

"Cuando llueve se pone muy jodido y más cuando corre viento, se nos levantan las chapas y se nos moja todo, nuestra ropa estaba flotando", contó muy triste Gabriel. 

Cómo es el volver a empezar

"Lo único que queda es agarrar lo que se pueda de agua y sacarla para la calle para poder caminar en medio del barro aunque sea dentro de la casa", dijeron los vecinos, intentando rearmar sus hogares tras la tormenta.

Ezequiel, otro de los referentes, catalogó el diluvio como impactante y recalcó que lo único que queda es volver a empezar y remarla. "Justo me estaba yendo a buscar agua, porque es lo primero para lavar, para los chicos, para el té, para todo", comentó el joven. 

Casi todos los habitantes del asentamiento piden lo mismo, una ayuda del gobierno y que se revisen las condiciones en las que se vive, ya que se torna imposible. 

Esta es la realidad en varios sectores de la ciudad tras el fuerte temporal, entre inundaciones y muchos evacuados, más la perdidas de materiales esenciales para vivir.