Salta y Neuquén son los únicos dos distritos del país donde el empleo en la construcción presenta mejores índices que el año pasado. Esa burbuja, explicada en esta provincia por el impulso de la minería y en la Patagonia, por Vaca Muerta, se da en un contexto de una estrepitosa caída del trabajo en las obras a nivel nacional, que si bien parece haber llegado a un piso en los últimos meses, significó la pérdida de alrededor de 100 mil puestos en todo el país.

El último informe del Instituto de Estadística y Registro de la Industria de la Construcción (Ieric) señala que en agosto Salta llegó a los 12.162 empleos formales en la actividad. Representó una mejora del 3,4% con respecto a julio y 0,4% en relación a agosto de 2023.

En los datos acumulados de los ocho meses de 2024, el crecimiento del trabajo en la construcción salteña fue del 3,7% interanual. Neuquén también tiene una variación positiva, del 0,1%, en igual período. El resto de las provincias cuenta con números negativos: la media nacional del empleo en el sector cayó un 19,5% interanual entre enero y agosto.

La situación de Salta es particular por todo el impulso que generan las obras privadas relacionadas con la minería, tanto por la construcción de las plantas de litio (son tres en la actualidad ese proceso y otras dos que finalizaron en los últimos meses) como así también por los desarrollos inmobiliarios que se generaron detrás de esta actividad. Si bien el panorama es destacable también hay señales de que la creación laboral en la construcción pudo haber llegado a un techo, si se tiene en cuenta que hay una desaceleración en las inversiones mineras a causa de la merma en el precio de referencia internacional de litio.

En cuanto al empleo que puede surgir por la obra pública en Salta, es mínimo, al igual que en todo el país, por la política de ajuste que implementa el Gobierno nacional. Se esperaba, y se había anunciado, una reactivación en este ámbito en agosto pasado, pero las obras que dependen de Nación siguen sin arrancar.

Constructoras

Sobre los empleadores, Salta también es excepcional. En septiembre (último registro del Ieric), se contabilizaron 455 empresas constructoras y subcontratistas en la provincia. Fueron 7 más (un 1,6% de crecimiento) que en igual mes del año pasado. La misma variación interanual positiva registraron San Juan (con un aumento de empresas del 5,4%) y San Luis (1,9%). En el resto de los distritos desaparecieron empresas; la reducción en el promedio nacional fue del 9,5% interanual.

Otro indicador que marca una mejor perspectiva para Salta es la cantidad de superficie que se autorizó para construir. El Ieric toma ese dato de una encuesta del Indec, donde se revela que entre enero y julio, la superficie permisada para la construcción en la capital salteña creció un 5% con respecto a los mismos 7 meses de 2023.

Esto significa nuevas obras (y por consiguiente empleo en la construcción) proyectadas hacia adelante.

Poco ánimo

En todo el país, el empleo registrado en la actividad de la construcción registró una moderada recuperación en agosto, al totalizar 348.822 puestos, lo que representa un alza del 0,8% mensual, según el informe del Ieric.

El estudio privado dio cuenta que "la evolución de agosto se suma al leve incremento del 0,5% evidenciado en julio, logrando marcar dos meses seguidos con variaciones mensuales de signo positivo, algo no visto desde marzo del año anterior".

Asimismo, consignaron que: "si bien pareciera haberse encontrado un piso en el volumen de ocupación y esto configura un hecho por demás positivo, lo cierto es que se da en niveles históricamente bajos, ubicándose un 13,6% por debajo de la media correspondiente a los meses de agosto del período 2010-2019".