Luego de conocerse el veto de la Ley de Financiamiento Universitario, a nivel nacional, a las 16, un grupo de estudiantes de la Unsa resolvió llevar adelante la toma del rectorado. Esta noche, desde el departamento de prensa, enviaron un comunicado informando las razones de la medida. 

"En el día de la fecha y en el marco de la aprobación del veto por parte de la cámara de diputados a la Ley de Financiamiento Universitario (que el gobierno provincial y legisladores provinciales han acompañado), la comunidad de la Universidad Nacional de Salta (en su heterogeneidad) informa la toma del Rectorado en un gesto de hermanamiento a la lucha de las universidades nacionales de todo el país que, al igual que nosotros, han decidido pronunciarse en defensa de la situación integral de la educación pública. En respuesta al ataque radical de los representantes de la democracia de nuestra sociedad han arrinconado a la educación pública en todas sus formas.

La emergencia de esta lucha busca fundir sus esfuerzos con las distintas  luchas que se están llevando a cabo en el País y continuar el camino surcado por los trabajadores de la salud del hospital Laura Bonaparte, las manifestaciones de los  jubilados, y los distintos pronunciamientos en denuncia de la vulnerabilidad en la que han terminado comedores comunitarios, salitas médicas y clubes barriales. 

Esta medida es sintomática de la situación estudiantil actual que padece los achaques del gobierno en contra del acompañamiento económico a estudiantes a partir de las becas progresar (que el oficialismo amenza con reducir y restringir), el apoyo a los investigadores del país con la postergación de la toma de posesión de las becas sostenida por el CIN  que se adhiere a los condicionantes impuestos al funcionamiento del sistema de becas del CONICET.

Quienes hemos decidió participar y organizar la toma, somos estudiantes, docentes y no-docentes organizados de manera autoconvocada que llamamos al resto de las facultades y sedes regionales de nuestra casa de altos estudios, a sumarse a la lucha, (dejando en claro que no contamos aun con el apoyo de centros de estudiantes, autoridades de la universidad). Esto, teniendo en cuenta que el presupuesto sólo será arrancado al gobierno en la medida en que nuestras fuerzas se generalicen.

Al mismo tiempo, apostamos porque el espíritu de lucha sea comprensivo de que no sólo estamos ante golpes económicos sino también culturales. En tanto el rol de las universidades como espacio de libre desarrollo de las ideas, se ha puesto en duda en los discursos del presidente Javier Milei en contra de la clase obrera trabajadora".