Mientras las autoridades de Aerolíneas Argentinas y tres gremios aeronáuticos continúan negociando un acuerdo que haga funcionar a la compañía sin conflictos, la Asociación Técnicos y Empleados de Protección y Seguridad a la Aeronavegación (Atepsa) anunció ayer un cronograma de medidas de fuerza que incluye paros intermitentes desde este sábado y hasta fin de mes.

Según indicaron desde el gremio en un comunicado, las medidas de fuerza comenzarán el sábado, cuando se verán afectados los despegues de vuelos internacionales entre las 20 y las 23 hora argentina.

En tanto, el lunes 18 será el turno de la aviación general y comercial no regular, de 15 a 18, mientras que el miércoles 20, de 7 a 9, y el viernes 22, de 18 a 20, la huelga tendrá consecuencias sobre los despegues de toda la aviación.

La acción sindical afectará el despegue de vuelos en 54 aeropuertos del país, entre ellos, el Aeropuerto Internacional Jorge Newbery.

El sindicato de controladores aéreos lanzó la medida de fuerza para pedir "libertad en la negociación colectiva" con el objetivo de obtener un "aumento salarial acorde a los servicios prestados".

Sostuvo que, dado que los servicios de navegación aérea "constituyen un servicio público esencial", procederá a ejercer el derecho constitucional a huelga "respetando y garantizando el porcentaje previsto en la reglamentación vigente", tal como acordaron "en el ámbito de la Secretaria de Trabajo".

"La medida legítima de acción sindical solo afectará despegues de aeronaves en todos los aeropuertos del país, es decir solamente afectará autorizaciones en tierra. Tampoco se recibirán planes de vuelo en el horario que afecte la medida", precisó.

El sindicato aclaró también que "quedarán exceptuados" de la medida de fuerza en las franjas horarias afectadas "las operaciones de aeronaves que eventualmente se declaren en emergencia, como aquellas que presten servicios sanitarios, traslado de órganos, humanitarios, de Estado y/o búsqueda y salvamento".

Sigue el diálogo

Ayer continuaron las conversaciones entre las autoridades de Aerolíneas y dirigentes de los gremios aeronáuticos. Según trascendió, la cuestión salarial es el punto aún sin resolver. El Gobierno propuso un incremento del 14%, mientras que la Asociación del Personal Aeronáutico (APA), la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (Apla) y la Asociación Argentina de Aeronavegantes (AAA) reclaman 35%.