Una organización dedicada al robo y posterior desarme de motos fue desbaratada en los últimos días en Metán, efectivos de la Policía de Salta llevaron a cabo siete allanamientos, concretando de esa forma el desarme de la presunta organización delictiva.

El Tribuno consultó distintas fuentes vinculadas con la investigación del caso, desde donde señalaron que uno de los hechos delictivos ocurrió el pasado domingo 11, cuando un hombre de 55 años salió de su vivienda y cuando regresó se dio con la sorpresa de que desconocidos habían ingresado al fondo de la casa, desde donde sustrajeron una moto 110 cilindrada.

A partir de ese momento una investigación se abrió en torno de la denuncia del damnificado, quien además de contar detalles del suceso dio características del vehículo sustraído, una Yamaha Cripton 110 cc, entre otros datos de valor para los investigadores.

Personal de la Dirección General de Investigaciones, con la intervención de la Fiscalía Penal 1 y el Juzgado de Garantías 1 del distrito judicial sur, llevaron a cabo distintas diligencias, acciones tendientes a dar con el paradero de los sospechosos.

En una zona rural colindante al río Juramento, los sabuesos encontraron el rodado denunciado totalmente desarmado. Esta modalidad de robar un vehículo para luego desarmarlo y vender sus partes ya venía siendo investigada por los uniformados, quienes vigilaban a los sospechosos.

La Policía logró confirmar que se trataba de una banda integrada por hombres mayores y menores de edad, y con varias pruebas entre sus manos el fiscal solicitó diversos allanamientos que fueron librados por el juez que actúa en la causa.

Entre 14 y 30 años

Diez personas fueron detenidas, el juez que entiende en la causa ordenó identificación simple para algunas de ellas y al mismo tiempo que sigan vinculadas a la causa, otras quedaron bajo arresto, mientras que los menores dos fueron detenidos y el resto entregados a sus padres.

Los allanamientos librados se realizaron en el barrio San Francisco de Metán, desde donde además de los detenidos los investigadores secuestraron teléfonos celulares, partes de motos que al parecer fueron robadas y luego desarmadas y documentación de valor para el proceso judicial. Los sospechosos tienen entre 14 y 30 años.