Propietarios de locales gastronómicos y hoteles de San Lorenzo se quejaron por los "desmedidos" controles fijos que realiza la Dirección General de Rentas de la Provincia (DGR). Desde el organismo impositivo, en tanto, indicaron que es parte de una nueva modalidad que se aplica desde este año.

"Es nuestro rol y nuestra función lo que estamos haciendo", afirmó ayer Mercedes Uldry, directora de la DGR. Son 23 comercios gastronómicos y hoteleros que tienen actualmente inspectores de la DGR controlando en sus locales. En una nota publicada por El Tribuno, los empresarios consideraron como un apriete el operativo. Contaron que los agentes se les ponen al lado al momento de facturar.

Uldry indicó que el punto fijo de fiscalización es una modalidad que "hacía AFIP" y que se planificó para este año "poniéndolo en la vanguardia". Añadió: "Se harán en todos los puntos que consideramos que no se están emitiendo facturas". Consultada por si es el caso de San Lorenzo, aseguró que habían indicios de que "como organismo de contralor había que controlar un poco más".

No es la primera vez que, según señaló, van a San Lorenzo. La funcionaria informó que se realizaron controles luego de la pandemia, en el 2021, y a fin de año en los nuevos emprendimientos comerciales de San Lorenzo Chico. En ese último control estuvieron acompañados por inspectores municipales por un convenio firmado con la intendencia sanlorenceña. "Es para la simplificación del sistema y la cooperación de lo que es la erradicación del comercio ilegal", indicó la funcionaria. La DGR también firmó con las intendencias de Capital, Orán, Tartagal y firmará con Cerrillos. "Queremos fomentar la concientización de la cultura tributaria, de lo importante que es pedir el comprobante que son impuestos que vuelven a la gente para poder mejorar, hospitales , rutas, parques", señaló Uldry que recordó que parte de ellos es "el Ticketon".

Las otras modalidades que venía realizando la DGR son controles más pasivos. La funcionaria explicó que tienen diferentes formas de fiscalizar que el comerciante emita facturas para luego pagar los impuestos sobre el monto de venta y "que vuelva a la gente". Una de ellas es la fiscalización mediante el ticket: se marca el último emitido y se vuelve cuando termina el fin de semana largo o la temporada. "Por el sentido común se supone que, con capacidad hotelera y zona turística colmada el ticket debería tener una evolución positiva. Además tenemos en cuenta las estadísticas que tenemos como organismo de contralor", precisó.

Otra forma es el cruce informático en base a "requerimientos que llegan por desviaciones que se hayan notado".

Las fiscalizaciones de ticket son las que se implementan en zonas turísticas como Iruya, San Carlos y Cafayate, donde los inspectores ya fueron y volverán para la serenata. "No es nada personal, estamos en carnaval en corredores turísticos", insistió la funcionaria.

La DGR recibe denuncias anónimas en las que, el 99 % son por no emisión de facturas. "A la gente le da vergüenza pedir las facturas", señaló.

Además de la modalidad, comerciantes se quejaron por lo prolongadas que serían las inspecciones y advirtieron que durarán hasta fines de febrero. Sin embargo Uldry descartó que haya un tiempo fijo.