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Pescadores se vieron sorprendidos al atrapar un sábalo de un llamativo color dorado brillante. Quisieron comerlo y no pudieron por ser bastante agrio.
31 DE Marzo 2024 - 19:58
Cuando la Semana Santa empuja a muchos a comer carne de pescado, un hecho asombra a propios y extraños, puesto que en los últimos días un grupo de pescadores atraparon un sábalo de color completamente dorado en el río Pilcomayo.
Franco Bravo, lugareño de Santa Victoria Este, fue a pescar en Formosa y sacó un "sábalo dorado". Comentó a El Tribuno que decidió pescar en la provincia litoraleña, en la zona de El Potrillo, en el puesto "La Piana". Allí, junto a sus amigos, pescaron como lo hacen habitualmente, salvo que en esta oportunidad se llevaron una sorpresa. "No sabés, era un sábalo dorado, brillante como oro", destacó Bravo.
El salteño comentó que uno de sus amigos decidió llevarse el pescado para comerlo en su casa, pero no pudo. "Mi amigo me escribió por mensajes y me dijo que no lo pudo comer, porque era bastante agrio", destacó. A su vez, indicó que el color amarillo no solo era en la parte exterior del pescado, incluso lo tenia hasta en los huesos. El ejemplar además tenía doble columna.
Las imágenes del "sábalo dorado" rápidamente generaron un cúmulo importante de comentarios en redes sociales. Hay quienes dudan de su veracidad, mientras que otros aseguran que, el color dorado del sábalo es un efecto de la contaminación del agua, no porque se trate de una especie particular.
Según la página Weenhayek Wet Wichi existe como especie el sábalo dorado, al que llaman Wahaát Tajuájmayo. Este en particular fue pescado en la cuenca baja, en la parte de Potrillo, Formosa.
La página también habla sobre una leyenda que indica que cuando los pescadores atrapan al sábalo dorado, deben soltarlo nuevamente al río, que ellos llaman Wahaát Wuk (Madre de los peces). Esa tradición aún la mantienen para garantizar la subsistencia del pez.