El merendero “El ángel de la bicicleta”, funciona hace 3 años en el barrio Solidaridad, zona sudeste de la ciudad. Hace más de 3 meses que les cortaron las provisiones, por lo cual se les dificulta continuar asistiendo a más de 150 niños, adultos y abuelos con la merienda. Aseguran que ya hicieron todos los papeles correspondientes y exigidos por la nueva gestión municipal, sin embargo sigue trascurriendo el tiempo y el hambre apremia a las familias de la zona.

En diálogo con El Tribuno, Micaela Córdoba, encargada del merendero, contó: “Nuestro merendero funciona hace 3 años, en pandemia se incrementó la cantidad de gente que viene, ya que la situación económica empeoró. Venía funcionando bien y recibíamos a más de 150 niños algunos con discapacidad, abuelos, adolescentes, y mamás con problemas de violencia”.

Y siguió: “Abríamos tres veces a la semana, los lunes, miércoles y viernes, desde las 18 a 19. Sin embargo, se nos cortaron los insumos y estuvimos esperando que la nueva intendencia se acomodé y nos pueda brindar de nuevo las provisiones. Antes nos daban mercadería y desde la panadería social nos daban el pan. Ya presentamos toda la documentación y estamos esperando que nos den una respuesta”.

Asimismo, Córdoba, dijo: “Antes también teníamos la ayuda de nación y prácticamente hace un año que no la tenemos. Estamos sin esos insumos y esperamos que se normalice, porque ya pasaron 3 meses de espera, la situación está peor que antes. Estamos sin nada”.

Los adultos mayores tenían un apoyo alimentario

Mercedes Arias, vecina que asiste al merendero, resaltó que gracias al merendero tenía un apoyo alimentario para su madre que es discapacitada y dijo: “Mi madre ya va a cumplir 88 años y siempre nos acercamos al merendero. Yo también tengo artrosis, pero mi madre tiene diabetes y no puede moverse mucho. En este lugar siempre nos ayudaron y también a muchos niños. Somos familias de escasos recursos”.

Luego, detalló: “Por lo general recibimos chocolatada, anchi, leche, arroz con leche. También mate cocido, mazamorra y pan casero. A veces también nos daban mercadería, que nos venía muy bien en estos tiempos tan difíciles. La alimentación es muy importante. Todo subió, con mi madre jubilada es difícil llegar a comprar para comer, porque tenemos que ocuparnos de sus remedios”.

Ningún merendero de la zona recibe provisiones

En tanto, Edith, dijo: “Este merendero no es el único que no está recibiendo las provisiones, sino todos los de la zona. Solidaridad es muy grande tiene cuatro etapas y familias muy vulnerables. Sería muy importante que se abra de nuevo la ayuda para los comedores y merenderos. Los políticos dicen que están mandando las cosas, pero a los barrios no llega nada”. Y afirmó: “Los alimentos son necesarios. A este merendero también viene gente del barrio Urkupiña, y de los asentamientos del vertedero San Javier”.

Luego, añadió: “Esta situación es muy triste, porque todas las familias de escasos recursos venían al comedor. Vienen y nos preguntan cuando vamos a tener comida. Los chicos se van tristes”.

Por su parte, Vicky, vecina que asistía al merendero, dijo: “Esperábamos la tarde por una merienda para llenar la panza, hay mucha necesidad por la economía que estamos viviendo. En mi caso tengo un chico especial para quién retiraba la leche y mercadería. También vienen mis nietos, pedimos una ayuda no sólo para ellos sino también para la gente mayor. Una tasa de té, mate, es una gran ayuda para nosotros. Hay gente que no tiene ni para un paquete de arroz”.

Esperan respuestas del municipio

Finalmente, desde el merendero, explicaron que las autoridades municipales les informaron que van analizar los papeles. Luego, la encargada del merendero comentó: “Nos parece entendible que revisen a donde se mandan las cosas, pero esperamos que sea algo rápido. Necesitamos que se vuelva abrir la panadería social, la necesidad es ahora, mañana puede ser tarde”.

Y dijo: “Por eso, le pedimos al Intendente que se acerque al barrio, nosotros trabajamos para la comunidad. Los chicos se van tristes, antes salían de las escuelas y retiraban chocolatada, mazamorra, leche, pancito, ahora se van sin nada y con la panza vacía. Aquí viene gente de todas partes, no podemos estar bien si nuestro entorno está mal. Tenemos un espacio físico que lo creamos con mucho sacrificio. Sepan que todavía no están funcionando los merenderos, que no hay mercadería”, finalizó Micaela Córdoba.

Los interesados en colaborar con el merendero “El ángel de la bicicleta”, pueden acercarse al barrio Solidaridad, cuarta etapa, dos cuadras antes del control del colectivo, sobre la avenida principal. Contacto: Micaela Córdoba encargada del merendero 3875145669