La ciudad de Salta no es ajena a las consecuencias de las lluvias continuas en la Provincia. Por un lado, la crecida del río Arias preocupa a los vecinos del asentamiento La Ciénaga, quienes temen perder sus viviendas. A esta situación también se le suma la crecida del río Arenales, donde los vecinos de los barrios Ceferino, 13 de Abril y Villa Angelita no pueden dormir desde hace tiempo por el miedo al derrumbe de sus casas.

Jesús, un vecino de la zona, contó la desesperante situación: "El río ya no sigue su cause, ahora entra a todo el barrio y hace como un mes y medio que solo queda medio metro de distancia de las casas", explicó el hombre angustiado.

Añadió que hace 14 años que viven con la preocupación de la crecida del río. Luego de la primera inundación, hace aproximadamente 13 años, comenzaron los trámites correspondientes para que las autoridades hagan algo al respecto; sin embargo, nunca recibieron una respuesta. "Nos enteramos que la Provincia había recibido en aquel entonces los fondos de Nación para canalizar el río, pero eso nunca apareció", detalló.

Los vecinos solicitan, además de la intervención de las autoridades, materiales como piedras y alambrones para evitar que el agua siga llegando a las viviendas. "Somos 40 personas las que estamos en peligro, hay que hacer algo rápido porque si llueve de nuevo puede pasar algo peor", lamentó.