Gimena Nuñez es la policía que está siendo juzgada por encubrimiento y falso testimonio en el marco de la causa del crimen de Cintia Fernández, ocurrido el 3 de mayo de 2011, en su departamento del barrio Parque La Vega.

Esta nueva etapa del caso continuará este viernes desde las 9.30, y tiene a Nuñez en el banco de los acusados luego de que declarara como testigo en el juicio que se llevó a cabo en mayo de 2019.

La integrante de la fuerza policial formaba parte de una unidad de la Brigada de Investigaciones cuando ocurrió el homicidio de Cintia. Hoy está acusada de intentar desviar la investigación en relación a la responsabilidad del expolicía Mario Federico Condorí, quien fue condenado a 23 años de prisión efectiva como autor del crimen.

El lunes pasado, la entonces jefa policial declaró durante la primera jornada del juicio, y manifestó que algunas situaciones podrían haber afectado su declaración "porque no recordaba muchas circunstancias que me preguntaban en ese momento".

En alusión al encubrimiento, Núñez negó el hecho de exigir el estampillado a la doctora que en su momento representaba a la madre de la víctima, y también negó de manera rotunda haber seleccionado a los testigos en la causa. "Gracias a las declaraciones que se tomaron se pudo ubicar a Condorí y luego detenerlo", dijo.

En esa primera jornada de este juicio, también declararon Ana Fernández, la madre de Cintia, y el procurador Pedro García Castiella, quien ratificó las dudas sobre el accionar de Nuñez durante la primera parte de la investigación del crimen de Cintia, que ella tuvo a su cargo- 

El juicio contra Nuñez se lleva a cabo con tribunal integrado por los jueces de la Sala IV del Tribunal de Juicio, María Cecilia Flores Toranzos (presidenta), Gabriela Romero Nayar y Marcelo Rubio (vocales interinos).

El fiscal Ramiro Osorio representa al Ministerio Público, Juan Casabella Dávalos está a cargo de la defensa y Pablo del Pino actúa como querellante en representación de Ana Fernández.