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El joven es uno de los juveniles salteños que viene trabajando y disfrutando junto al plantel profesional de Los Infernales. El base/escolta del Club Los Cachorros, cuenta lo que viene viviendo hace dos temporadas.
25 DE Junio 2024 - 02:04
Desde su irrupción en el básquet de la provincia, Salta Basket se constituyó en una meta a cumplir para muchos jóvenes apasionados por este deporte. Despertó en centenares de niños y niñas el deseo de botar una pelota de básquet y acercarse a un club de barrio para jugar y ser alguna vez un “infernal”. Meta que desde muy chico tuvo el juvenil Valentín Villalobos, siendo un adolescente comenzó limpiando el parquet del Estadio Delmi para sentirse parte del equipo y hoy, ese sueño, se hizo realidad gracias al esfuerzo y el talento del joven de 19 años.
Nacido en Salta capital un 10 de septiembre de 2004, el base/escolta tuvo la oportunidad de ser convocado por el staff de entrenadores del Salta Basket hace dos temporadas para formar parte de las prácticas, como tantos otros jóvenes salteños que se destacan en sus clubes de origen. A partir de ese momento, Valentín no desaprovechó la oportunidad en la temporada que está culminando tuvo la chance de que el entrenador en jefe, Ricardo De Cecco, lo convocara para partidos oficiales. Un sueño hecho realidad para un chico que recién comienza a dar sus primeros pasos en el universo naranja.
“Fue una temporada excelente para todo el grupo, la verdad me llevo muchas enseñanzas de parte de todos. Es una alegría inmensa haberme cambiado para partidos oficiales, un sueño hecho realidad ser parte de Salta Basket en La Liga Argentina”, sostuvo el juvenil quien expresó también lo que se siente al poder entrenar con una estructura profesional como la de Los Infernales: “Es muy lindo que te llamen y comenzar a tener roce con pibes que están a un nivel altísimo. Entrenar a ese nivel te hace mejorar muchas cosas, te hace cambiar un montón de hábitos para mejorar no solo en lo deportivo sino como persona”.
Momentos de incertidumbre
El juvenil contó que además del esfuerzo y la constancia que hay que tener para formar parte de un equipo profesional en la segunda división del básquet argentino, también hay que saber asimilar momentos de incertidumbre cuando las cosas no salen como uno pretende. “Tuve miles de incertidumbre, momentos de frustración pero lo bueno fue que tanto en los profes, como en mis compañeros y la familia encontré el sostén que necesitaba”.
“Los entrenadores y mis compañeros me ayudaron a corregir, a calmarme y eso habla de un gran grupo humano que se formó. ¿Qué hice para seguir adelante? Hablarlo con mis compañeros y el DT (Ricardo De Cecco) y sus asistentes (Marcelo Outeyral y Andrés Lizárraga), siempre estuvieron para ayudarme y hacerme mejor dentro y fuera de una cancha.
El objetivo, la meta
Como tantos niños, niñas y jóvenes Valen es uno de los que soñó con algún día ser parte de Los Infernales. Y eso que tanto anhelaba con su corazón un día se cumplió, no fue ni sigue siendo fácil pero él más que nadie sabe que con disciplina deportiva, perseverancia y pasión los sueños se cumplen.
“Creo que Salta Basket es una meta para cualquier jugador salteño porque es la única ventana profesional que tenemos. Para mí desde muy pequeño siempre fue una meta, comencé siendo uno de los chicos que limpiaba el piso en los partidos en el Delmi, desde entonces tenía en mente que quería ser parte de Los Infernales”, sostuvo el juvenil jugador del Club Los Cachorros, institución donde a la disciplina de la naranja la instaló su padre: Rodrigo “Guri” Villalobos.
“La verdad que hoy estoy contento y orgulloso de ser uno de los juveniles de Salta Basket, ser parte del equipo y entrenar con ellos es toda una meta, un hermoso desafío. Ahora hay que seguir aprendiendo, mejorando y disfrutando cada momento”, expresó el base.
Transferencia cultural/pasión
Y si de su papá se trata, a Valentín se le nota en el rostro el amor y todo lo que Guri Villalobos le transfirió. Pero lejos de ser el único, su abuelo Pancho es parte trascendental en esa pasión por el deporte de la naranja. El joven de 19 años sostuvo que fueron ellos dos quienes le transmitieron esa hermosa pasión por el básquet.
“Mi abuelo Pancho es un loco por el básquet, a sus 75 años sigue jugando y disfrutando en una cancha, es mi héroe. Y mi viejo, el Guri, es la persona que sigo desde que tengo uso de razón. Me acuerdo cuando él jugaba en Talleres de Perico ya lo acompañaba, después se hizo técnico y sigo a su lado, acompañándolo a los entrenamientos y por supuesto me inculca lo que sabe de este deporte. Siempre estamos en una cancha juntos”, contó con la satisfacción de hablar de personas especiales.
“Ver la pasión que le pone a lo que hace, en un entrenamiento o en un partido, ver cómo entrena a sus equipos o a la hora de competir me transmitió algo muy fuerte con este deporte y quiero seguir su ejemplo. Es hermoso compartir la misma pasión con mi viejo. Fue una locura lo que me transmitieron los dos, mi papá y mi abuelo, son apasionados y yo sigo ese camino”, concluyó Valentín Villalobos, uno de los juveniles infernales.
FICHA PERSONAL
Nombre y apellido: Valentín Villalobos
Fecha y lugar de Nac.: Salta capital 10/09/2004
Altura: 1,82
Posición: Base/Escolta
Club de inicio: Tribuno Básquet (TBB)
Carrera: Tribuno Básquet (2014-2020), Sargento Cabral (Torneo Federal 2020-2021), Club Los Cachorros (2021-2024). Salta Basket, entrena desde la temporada 22-23/ 23-24. Selección de Salta U13, Preselección de Salta U15, Selección U17.
Anhelos: Ser jugador profesional y viajar.