Acceso web El Tribuno:
www.eltribuno.com
Contacto:
Editor: Pablo Juarez
E-mail: pjuarez@eltribuno.com.ar
Teléfono: +54 387 4246200
Por cualquier consulta administrativa o referida al sitio, puede escribirnos a: contactoweb@eltribuno.com.ar
Director: Sergio Romero
Telefono: +54 0810 888 2582
Razón Social: Horizontes On Line SA.
Registro de propiedad intelectual: 69686832Domicilio: Av. Ex. Combatientes de Malvinas 3890 - CP (A4412BYA) Salta, Argentina.
En lo que va de 2024 hubo 12 casos que se habían dado en los departamentos de Orán, San Martín y Anta. Se registraron tres fallecimientos.
23 DE Julio 2024 - 02:19
Especialistas de Salud Pública investigan cuál es la posible fuente de contagio de hantavirus que afectó a la adolescente de 16 años fallecida en el paraje Alemanía, Guachipas. El caso es considerado atípico, ya que la transmisión en esa región del centro provincial es inusual, a diferencia del norte, considerada una zona con transmisión histórica, más precisamente en Orán, San Martín, Rivadavia y Anta.
Al ser consultado por este punto, el director general de Coordinación Epidemiológica del Ministerio de Salud de la Provincia, Francisco García Campos, respondió: "Estamos en plena investigación justamente para determinar cuál es la posible fuente de infección".
La infección por hantavirus es una zoonosis, es decir que se trata de una enfermedad que se transmite desde un animal al ser humano. El agente transmisor de hantavirus es el ratón rural, que vive en ambientes como maizales, cañaverales, bosques y pastizales, no la rata urbana.
Desde el jueves pasado los equipos de Zoonosis y de Vigilancia Epidemiológica trabajan en el paraje Alemanía. Se supo que la joven fallecida no se había desplazado del lugar, por lo menos 45 días antes de que se enfermara, tiempo que coincide con el período de incubación.
"Esa es la información que tenemos hasta ahora. Estas cosas por ahí a veces cambian cuando uno va avanzando en la investigación. Los equipos están trabajando y recabarán más datos y conoceremos los resultados", precisó García Campos.
Los especialistas reconstruyen el itinerario por donde la joven se desplazó y se tratan de identificar posibles focos de infección que estuvieran colonizados con roedores compatibles, los colilargos, que son los que transmiten la enfermedad.
Como medida preventiva, se ha intensificado la vigilancia de hantavirus en las áreas operativas de La Viña y Cafayate, por un período de 90 días y se busca proteger la salud de la población.
Además se conocieron estadísticas de hantavirus, a nivel provincial. En 2019 se registraron 31 casos; en 2020: 14 casos; en el 2021: 19 casos; en el 2022: 26 casos y el año pasado: 33 casos. En lo que va de 2024 hubo 12 casos distribuidos en los departamentos de Orán, San Martín, Anta y ahora Guachipas, y se registraron tres fallecimientos.
"No es que tenemos un aumento desmedido en el número de casos, sino que se han presentado de una forma regular en lo que va del año; es decir, tienen un comportamiento de una distribución normal dentro de la semana epidemiológica", sostuvo García Campos.
Sin embargo, aclaró que no se sabe qué puede pasar en el segundo semestre del año, porque por lo general tienden a aumentar más los casos en la época de primavera en septiembre y octubre, al aumentar la población de roedores.
Se considera un caso sospechoso de hantavirus a toda persona que presente fiebre aguda, sin dolor de garganta y secreción nasal; al menos uno de los siguientes síntomas: cefalea, mialgias, malestar general, náuseas, vómitos, diarrea, dolor abdominal, dificultad respiratoria, disnea, infiltrados intersticiales; y/o hallazgos de laboratorio como descenso de plaquetas y presencia de inmunoblastos. Además, si entre una a seis semanas previas al inicio de los síntomas hubo exposición al hábitat de roedores reservorio o zona endémica o si mantuvo contacto estrecho con un caso confirmado de hantavirus durante el período de transmisibilidad de este último, es decir, dos días previos y hasta cinco días posteriores al inicio de la fiebre.
Se recomienda a la población, mantener limpios los domicilios y los terrenos baldíos, a fin de evitar la presencia de roedores que son los que transmiten la enfermedad a través de su saliva, heces y orina.