El pasado 9 de agosto, en la ciudad de Joaquín V. González se desató un gran incendio en el predio del complejo deportivo municipal. Allí había varias fondas de comidas debido a las fiestas patronales que se celebraron el día anterior. Debido a la rápida acción de vecinos y Bomberos Voluntarios solo se lamentaron pérdidas materiales, sin víctimas fatales.

Según los informes preliminares, el fuego, que comenzó en uno de los puestos de comida, se propagó rápidamente, afectando al menos a seis locales aledaños. Bomberos voluntarios y fuerzas de seguridad acudieron al lugar para controlar la situación.

Testigos relataron que la policía fue de las primeras en llegar, pero las condiciones eran extremadamente peligrosas debido a la presencia de garrafas en la mayoría de los puestos. Sin embargo, el rápido accionar del personal de la bicipolicía fue crucial para evitar una tragedia mayor. Lograron rescatar a una pareja que dormía en uno de los puestos afectados. Según un testigo, "una mujer fue rápidamente socorrida por un policía que se abalanzó sobre ella y la arrastró a un lugar seguro. Luego, otros efectivos rescataron al hombre que aún permanecía dentro del puesto".

Los bomberos, al llegar al lugar, enfrentaron dificultades para actuar de inmediato debido a la presencia de cables eléctricos, lo que impedía el uso de agua. Se tuvo que esperar a que personal especializado cortara el suministro eléctrico antes de poder sofocar las llamas, que amenazaban con seguir extendiéndose debido a la naturaleza altamente combustible del material en la zona, como tarimas de madera y plásticos.

El saldo final dejó pérdidas materiales totales en al menos cinco puestos. Siete garrafas fueron controladas, pero una de ellas explotó, generando pánico entre los presentes. Las autoridades municipales ya están al tanto de la situación y se espera una pronta respuesta para asistir a los damnificados. 

Este incidente pudo haber terminado en tragedia, pero la rápida y valiente acción de las fuerzas de seguridad evitó un desenlace fatal.

Los feriantes lo perdieron todo

En el predio del complejo deportivo Prof. Emilio Zigarán se encontraban alrededor de 100 puestos de comida. Allí trabajaron por tres noches en el marco del Agosto Cultural por las fiestas patronales del lugar. Debido al incendio a causa de una garrafa de gas, unas 9 familias perdieron todas sus pertenencias. 

Laura, una de las afectadas detalló que a las 14 iban a sacar todos los elementos del complejo. Lamentablemente el fuego consumió todo, desde heladeras, chapas, mesas y sillas, en horas de la mañana.

A pesar del rápido accionar de Bomberos Voluntarios todo se consumió rápidamente y quedaron solo cenizas en el lugar. "Perdimos muchas cosas de valor, incluso los electrodomésticos nos habían prestado algunos amigos para que pongamos el puesto", enfatizó Alejandra.

Maira Cejas, una feriante que tenía su puesto de trabajo en el lugar también perdió sus pertenencias. "Mis sobrinos habían quedado cuidando lel puesto, por suerte la policía los rescató y los sacó del lugar", detalló entre lágrimas Maira. Particularmente este año decidido poner su puesto para recaudar fondos para su marido ya que se encuentra atravesando un problema de salud y necesita viajar a Buenos Aires el próximo 27 de agosto.