Un padre precavido ya tenía el regalo comprado para este sábado y aprovechó la tarde para pasear con su pequeña bebé. "Es muy chiquita para pedir algo en específico", pero sí notó en sus compras la diferencia de precios entre la calle y los locales comerciales: "La gente suele elegir el mejor precio antes que la calidad, y yo siempre priorizo lo segundo, porque si no, las cosas no duran".
Hay familias que, debido a la cantidad de niños en el hogar, deben buscar entre las ofertas y los mejores precios. Este es el caso de una abuela que le comentó a El Tribuno que tiene 40 nietos. "Los precios están por las nubes y hay que buscar", afirmó.
La mujer explicó que los regalos materiales los reserva para los más chiquitos y con los más grandes elige dar un paseo por el parque, porque sino el presupuesto se hace demasiado elevado y sumó que lamentablemente sus nietos "deberán aceptar el regalo de acuerdo a lo que nos alcance".