Los datos comparativos del segundo trimestre de 2023 y 2024 proporcionados por el Indec revelan un panorama laboral complejo en Salta y hay una claro eco también de la economía real. La tasa de desocupación tuvo una leve suba y una mayor cantidad de trabajadores están en la búsqueda de mejores condiciones laborales, lo que sugiere un mercado laboral estancado y con señales de insatisfacción.

La tasa de desocupación pasó del 5,0% en el segundo trimestre de 2023 al 5,5% en el mismo periodo de 2024. Esta variación representa a 2.000 personas más sin empleo, elevando la cifra total de desocupados en el Gran Salta. Este incremento en la desocupación resalta las dificultades que enfrenta el mercado laboral de Salta para absorber a su creciente fuerza de trabajo.

La tasa de empleo bajó levemente de 43,4% en 2023 a 43,0% en 2024. A pesar de la pequeña diferencia de 0,4 puntos porcentuales, este descenso refleja una ligera desaceleración en la capacidad de generar nuevos puestos de trabajo. Al mismo tiempo, la tasa de actividad, que se mantuvo prácticamente estable en 45,5%, indica que la participación de la población en el mercado laboral no ha variado significativamente, con un crecimiento moderado de la población económicamente activa de 300.000 a 302.000 personas.

Otro indicador que preocupa es la tasa de ocupados demandantes de empleo, que pasó del 17,5% en 2023 al 19,5% en 2024. Este aumento sugiere que un creciente número de trabajadores que ya tienen empleo están buscando nuevas oportunidades, insatisfechos con sus actuales condiciones laborales. En términos absolutos, esto significa que 7.000 personas más (pasando de 52.000 en 2023 a 59.000 en 2024) están en la búsqueda activa de mejoras salariales o laborales, un reflejo del malestar económico y la necesidad de mayor estabilidad.

Si bien la tasa de subocupación (trabajadores que desean y están disponibles para trabajar más horas de las que actualmente trabajan) ha disminuido de 13,6% en 2023 a 12,3% en 2024, lo que sugiere una mejora en las horas de trabajo disponibles, la subocupación demandante aumentó. Este indicador, que mide a aquellos que trabajan menos horas pero buscan activamente más trabajo, creció de 6,7% a 7,3%. Aunque hay menos subocupados (de 41.000 a 37.000 personas), los que permanecen en esta situación están luchando por mejores oportunidades.

A pesar de un leve aumento en la población ocupada (de 285.000 a 286.000 personas), la creación de empleo no ha sido suficiente para acomodar a toda la fuerza de trabajo que ingresa al mercado. El crecimiento demográfico no se tradujo en un aumento sustancial de empleos, lo que se ve reflejado en la estabilidad de la tasa de actividad y la caída de la tasa de empleo.

El análisis del mercado laboral de Salta en el segundo trimestre de 2024 revela bien si bien se ha logrado mantener ciertos índices , no está generando suficientes oportunidades para los trabajadores. El leve aumento en la tasa de desocupación y el incremento de personas que buscan mejores oportunidades laborales son señales de advertencia de un mercado que no responde a las necesidades de su población. Todo en un contexto de una economía marcada por el ajuste fiscal.

El desafío para las autoridades y los sectores productivos de la provincia radica en impulsar políticas que no solo fomenten la creación de empleo, sino que mejoren la calidad de los trabajos disponibles, ofreciendo estabilidad y salarios que respondan a las expectativas de la población activa. Si bien la minería está al frente de la generación de más empleo, se necesita tener una mirada integral.